Sanidad cerrará el centro, que rehabilitará la parte afectada o lo demolerá para construir uno nuevo aunque los plazos no están fijados
MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
El secretario general del Partido Socialista de Madrid (PSM) y portavoz del Grupo Parlamentario del PSOE en la Asamblea, Tomás Gómez, ha exigido al Gobierno regional que invierta un millón de euros en el Centro de Especialidades Fuencarral, con una cartera de 70.000 tarjetas sanitarias y con problemas de cimentación, con el fin de evitar su cierre definitivo.
Gómez ha visitado este martes las instalaciones, ubicadas en el barrio de Valverde, acompañado del concejal portavoz del PSOE del distrito, Pedro Zerolo, técnicos de Sanidad y trabajadores, después de que los vecinos hayan alertado de las consecuencias del cierre de este centro, pues aseguran que tendrán que desplazarse a los alrededores con los problemas que eso supone para una población mayor en general.
Según ha explicado el socialista, el centro "se está cayendo a cachos" por un problema en la cimentación. "Se está hundiendo y no ha sido rehabilitado en su momento", ha explicado, al tiempo que ha señalado que, no obstante, se reformó la mitad del centro en el año 2002 y que se tendría que haber rehabilitado la otra parte también porque los problemas con las arenas de arcilla estaban en todo el edificio.
Gómez ha destacado que se trata de un centro que da servicio a un barrio "de personas mayores y humildes, sin exceso de recursos" y que ahora, si no se lleva a cabo la rehabilitación, el cierre será de carácter "inmediato" y tendrán que trasladarse a otros centros de los alrededores para los que hay que coger, por ejemplo, transporte público.
Haciendo hincapié en que se trata de pacientes que son mayores, que ya tienen su "hábito con el médico" y que incluso habrá que modificar alguna línea de autobús de la EMT para esta cuestión, Gómez ha explicado que llevarán este problema al Parlamento madrileño y que exigirán la inversión de este millón de euros que, según los informes técnicos de los arquitectos, es la cantidad que se necesita para rehabilitar la segunda parte.
"Por muy bien que lo quieran hacer ocasiona problemas serios", ha considerado Gómez, quien ha señalado que Sanidad se puede gastar este millón de euros que se necesita porque, por ejemplo, la Comunidad ha destinado en los últimos cuatro años un total de 700 millones para propaganda.
Además, ha indicado que este año hay una partida bajo el nombre de Fondo de Contingencias con un total de 2.500 millones de euros y que aún no se sabe para qué se va a utilizar. "Es sensato, lo ético y lo obligado que se gaste un millón de esa cantidad y es lo que el Gobierno tendría que hacer en este momento", ha insistido.
Si no se lleva a cabo esta rehabilitación, el centro tendría que cerrar "con carácter inmediato" y ha señalado que, teniendo en cuenta "cómo hace las cosas Aguirre", si el centro se cierra, "nunca más se va a abrir". "Infraestructura que se cierra, infraestructura que se cierra para siempre", ha lamentado.
Por su parte, la subdirectora gerente del Hospital Universitario La Paz, Mercedes Fernández de Castro, ha explicado, en declaraciones a Europa Press, que el centro se va a cerrar porque "es prudente" que se haga. Ha apuntado que los informes del Ayuntamiento reflejan que hay "deficiencias estructurales" y que van a buscar una solución.
Esta solución pasa, o bien por rehabilitar la parte que falta o bien por demolerlo y construir uno nuevo. Para la subdirectora, el abrir de nuevo el centro sería la "solución más acertada" pero ha reconocido que no es algo que dependa de ella sino de la Consejería de Sanidad y de la capacidad presupuestaria que haya en estos momentos.
Mientras que se cierra el centro, desde Sanidad quieren garantizar la asistencia en la medida de sus posibilidades y habrá muchos pacientes que puedan acceder a determinadas especialidades directamente en el Hospital La Paz, como los que tengan patologías músculo o esquelética, pues en el centro hospitalario hay consultas de traumatología, de rehabilitación, de fisioterapia y de reumatología.
Martínez de Castro ha detallado que otras especialidades, "por razones de espacio", no se pueden atender en el Hospital La Paz, y los pacientes tendrán que acudir al José Marvá, en la calle Bravo Murillo, con acceso de Metro y una línea de EMT o al de Peñagrande, que si bien está "un poco más apartado", se va a pedir una modificación de líneas de la EMT.
VECINOS PREOCUPADOS
Los vecinos, que se han sorprendido con la visita de Gómez al barrio, han aprovechado la presencia de los medios para denunciar su "preocupación" por la situación y para pedir "por favor" que no acaben con el centro. "Es una excusa porque lo quieren cerrar y no hay motivo para ello", ha dicho una de las pacientes, Felisa Benito.
Con una muleta y los ojos llorosos, ha explicado que su marido está con oxígeno y que como ellos, la mayoría de los vecinos. "Somos todos muy mayores, que no nos lo cierren por favor, iremos a donde sea, todos juntos", ha pedido la vecina, quien ha explicado que ellos tienen que trasladarse a Peñagrande o a La Paz --ha reconocido que este último es el más cercano--.
Este sábado, 4 de febrero, tienen asamblea vecinal para tratar la situación porque son conscientes de que el cierre de las instalaciones tiene carácter inmediato y ha asegurado que acudirán todos porque "es un crimen lo que se está haciendo" con ellos.
La doctora Roldán, de Cardiología del Hospital La Paz, ha explicado que llevan con este tipo de problema desde 2002 y que "el centro no se ha caído encima". Ha destacado que es un centro "agradable, donde se trabaja muy bien" y que se hace "bien la medicina", con consultas de alta resolución "donde a veces el proceso se resuelve en escasos tres o cuatro días".
La doctora ha explicado que lo que los trabajadores quieren es que se rehabilite, que se "insistía" en obtener ingresos por otro lado y no se "recorte" la salud, "que es sostenible". "Quien diga lo contrario miente, y es el mejor patrimonio que tiene con la educación cualquier ciudadano de este país", ha concluido.