MADRID, 22 May. (EUROPA PRESS) -
El portavoz del Grupo municipal socialista, Jaime Lissavetzky, ha pedido este miércoles a la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, que paralice el desmantelamiento del sistema de Salud del Ayuntamiento de Madrid, conocido como Madrid Salud, ha informado el grupo municipal socialista en un comunicado.
En la visita realizada esta mañana a uno de sus centros, ubicado en la calle de Montesa, Lissavetzky ha reivindicado la labor de esta institución de referencia en prevención y atención sanitaria y ha alertado a la alcaldesa de las consecuencias económicas y sociales que tendrán los recortes este servicio.
"Los doce millones recortados en prevención nos traerán 48 en gasto para tratar las consecuencias", ha subrayado el dirigente socialista y ha reclamado también rigurosidad a Botella en el debate que mantiene abierto con la Comunidad de Madrid para eliminar duplicidad, esto es, servicios que prestan ambos Ejecutivos. Sostiene que casos como el Madrid Salud evidencian que lo que se consideran servicios iguales no lo son en realidad.
En concreto, la red municipal de salud realiza una actividad que complementa a la prestada por el Gobierno regional y, además, ofrece una atención de proximidad que no puede prestar otra institución más que el Consistorio.
El portavoz socialista ha señalado que, en caso de que los centros desparezcan en virtud de la negociación entre el Ayuntamiento y Comunidad, el PSOE dará marcha atrás al acuerdo en caso de acceder a la alcaldía. "Estos centros tienen mucho sentido dentro de la ciudad", ha recalcado.
El portavoz socialista, acompañado de los concejales Diego Cruz, Pablo García-Rojo y Carmen Sánchez Carazo, ha visitado el Centro Municipal de Montesa, en el distrito de Salamanca, y que es un referente en promoción de la salud, salud medioambiental, consumo, vacunación, además de poseer un importante Laboratorio de Análisis que, en la actualidad, sufre constantes recortes.
Madrid Salud, ha visto disminuir su presupuesto en doce millones de euros en apenas dos años. Al recorte del 4,5% aplicado en el presupuesto de 2012, se suman ocho millones que no se gastaron el año anterior.
Para Lissavetzky, estas políticas de tijeretazo constituyen un error, pues la experiencia en el ámbito sanitario demuestra que por cada euro que se recorta en prevención al final genera un gasto de cuatro euros, tres en atención sanitaria y uno en gasto farmacéutico, necesarios para paliar las consecuencias. Aplicado al caso municipal, los doce millones de euros recortados en el último bienio exigirán un gasto de 48 millones en el futuro.
El portavoz ha reiterado que Madrid Salud ocupa un lugar clave en el campo de la prevención en la ciudad y destacó, especialmente, la atención a drogodependencias: "Es un modelo que se estudia en los congresos internacionales" por aplicar una atención integral de prevención, tratamiento y reinserción social, añadió, antes de destacar que este servicio a drogodependientes es precisamente donde mayores ajustes se están registrando.
Por ello, el concejal del PSOE ha exigido a Botella a que no insista en la senda del recorte y que convierta a Madrid en la ciudad del bienestar.