MADRID 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
La liraglutida reduce el peso y la prevalencia de factores de riesgo en personas obesas sin diabetes, según un estudio de la Universidad de Copenhague en Dinamarca que se publica en la edición digital de la revista 'The Lancet'. Además, las dosis altas del fármaco producen una mayor pérdida de peso que el fármaco orlistat.
El estudio se desarrolló en 19 localizaciones europeas y se analizó a 564 personas de entre 18 y 65 años y con un índice de masa corporal (IMC) de entre 30 y 40. A cada paciente se asignó a una de cuatro dosis subcutáneas diarias de liraglutida (1,2 mg, 1,8 mg, 2,4 mg, 3 mg), a un grupo placebo y a un grupo que tomaba tres veces al día orlistat oral (120 mg).
Todos los participantes siguieron también una dieta que restringía el consumo de calorías y que contenía alrededor de 500 calorías menos de las que necesitaban cada día. Todos aumentaron además su actividad física durante el ensayo.
Los participantes del grupo de liraglutida perdieron más peso que los del grupo placebo u orlistat. La media de pérdida de peso con las dosis de liraglutida de 1,2; 1,8; 2,4; y 3 mg era de 4,8; 5,5; 6,3; y 7,2 kilogramos respectivamente en comparación con los 2,8 kilogramos del grupo placebo y los 4,1 kilogramos del grupo de orlistat.
Según los investigadores, una proporción más elevada de individuos (76 por ciento) perdió más del 5 por ciento de peso con 3 mg de liraglutida en comparación con el placebo (30 por ciento) o el orlistat (44 por ciento). La liraglutida también redujo la presión sanguínea en todos sus dosis.
Al inicio del estudio alrededor de una tercera parte de los pacientes de cada grupo tenía prediabetes, que es un malo control de la glucosa en sangre pero que no es lo suficientemente malo para calificarse como diabetes. La liraglutida redujo la prevalencia de la prediabetes entre un 84 y un 96 por ciento con las dosis de 1,8 y 3 mg al día. En los individuos que tomaban este fármaco eran más frecuentes las náuseas y vómitos que en el grupo placebo pero estos efectos secundarios eran transitorios y rara vez llevaron a dejar el tratamiento.
Los resultados indican, según concluyen los investigadores, los posibles beneficios de la liraglutida en combinación con una dieta baja en calorías para el tratamiento de la obesidad y los factores de riesgo asociados. Los autores afirman que la liraglutida ofrece un nuevo modo de acción en el tratamiento de la obesidad y una mayor eficacia en comparación con las terapias existentes en la actualidad. Además, su efecto sobre la prediabetes sugiere que podría ser importante en el tratamiento de los individuos prediabéticos.
Por último, los científicos añaden que será necesario realizar posteriores estudios con un seguimiento superior a las 20 semanas para establecer el perfil de riesgo-beneficio a largo plazo para la liraglutida.