MADRID 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Liga Reumatológica Española ha avisado de que el copago de fármacos de dispensación hospitalaria a pacientes no hospitalizados va a suponer una carga más para los pacientes y, por el contrario, no va a significar un ahorro "significativo" para el Sistema Nacional de Salud (SNS).
Y es que, a pesar de que con esta medida los pacientes van a tener que pagar un máximo de 4,20 euros por el medicamento, la asociación ha advertido de que este coste puede significar que el paciente deje de tomar la medicación, cuando se ha demostrado que el cumplimiento de las dosis prescritas se asocia "claramente" a "mejores" resultados en salud y "menos costes" en complicaciones.
"Los medicamentos biológicos que son dispensados para el tratamiento de estas enfermedades suponen un coste elevado por paciente para el SNS, en torno a 8.700 euros por paciente y año, pero sólo lo usan entre un 10 y un 20 por ciento de los pacientes. Esto significa que la aportación que ahora se les hará pagar, no va a significar en absoluto un ahorro significativo para el SNS y sí una carga más para ellos con su ya pesada servidumbre, que les obliga a costear cada mes entre 4 y 5 fármacos más los costes derivados de su dependencia", ha lamentado.
Dicho esto, la Liga Reumatológica Española ha recordado que estos medicamentos ya están "muy regulados" a nivel hospitalario y que ni las farmacias hospitalarias aceptan dispensarlos sin un informe "detallado y riguroso" fruto de un consenso del servicio prescriptor, "ni siquiera de un solo facultativo", y compromiso de vigilar "estrechamente" su eficacia en el paciente al que se administra.
Además, ha proseguido, con el copago "tampoco" están evitando que se prescriban y están "gravando" doblemente a estos medicamentos, que además el paciente no se pone "por que sí, ni los puede pedir sin más".
"La puesta en funcionamiento del sistema de copago está obligando a unos gastos de gestión que anulan los supuestos beneficios económicos. En patologías crónicas, el copago no es una solución y mucho menos aún el copago de medicamentos tan regulados. Si queremos ahorrar en medicamentos de dispensación hospitalaria hay otras medidas más efectivas que pasan por compartir los costes con los laboratorios farmacéuticos o que abaraten los precios, pero el paciente, que no tiene la culpa de nada de esto, no debe ser quien pague por ello", ha zanjado.