MADRID, 30 May. (EUROPA PRESS) -
Una coalición internacional de líderes de salud pública ha solicitado a los gobierno su compromiso y nuevos esfuerzos para promover la aceptación de la vacunación como medio para eliminar enfermedades prevenibles, incluidas las enfermedades infantiles como el sarampión, las paperas y la rubéola.
Desde la plataforma Salzburg Global Fellows, la Declaración - que ha sido firmada por 14 expertos reconocidos internacionalmente -ya ha sido respaldada por más de 50 líderes de salud pública de Europa, Asia, Australia, África y América. Así se han comprometido por su parte a apoyar el desarrollo y la implementación de nuevos programas de comunicación basados en hechos, para ayudar a las familias, a la comunidad y a los líderes gubernamentales a tomar decisiones apropiadas en la inmunización infantil, asegurando un suministro continuo y asequible de vacunas necesarias.
La Declaración de Salzburgo sobre la aceptación de la vacunación respalda, entre otras medidas, incorporar leyes que exijan la vacunación infantil, cuando sea probable que mejore la salud; restaurar la confianza de la sociedad en la vacunación como base del progreso de la salud pública; unir fuerzas para corregir información engañosa en las redes sociales y en entornos comunitarios; y un mayor compromiso a la hora de escuchar y comprender las barreras y preocupaciones de los padres, para que las vacunas y los servicios de salud sean más accesibles y fáciles de usar.
"Esta declaración representa el consenso de un grupo de líderes independientes en salud pública, derecho y medicina que están profundamente preocupados por la creciente amenaza de la vacilación de los padres para vacunar a sus hijos contra las enfermedades infecciosas prevenibles", han señalado el Académico Senior Scott Ratzan, de la Escuela de Graduados de Salud Pública y Política de Salud de CUNY (CUNY SPH), en EEUU.
Consideran que se ha convertido en un problema desde el momento en el que la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado que la posibilidad de dudar en usar una vacuna es una de las diez mayores amenazas mundiales para la salud humana de este año, "es hora de tomarse muy en serio a los opositores de la vacunación", han añadido.
"La erosión de la confianza de los padres puede tener un daño duradero para la salud pública. Debemos responder con mayor creatividad, propósito y generosidad de espíritu y utilizar enfoques multisectoriales para abordar este problema", ha continuado el experto.
El miembro fundador del GTI, Lawrence Gostin, profesor de Derecho de la Universidad de Georgetown y director del Centro Colaborador de la OMS para la Ley de Salud Nacional y Global, explicó que "el resurgimiento de enfermedades potencialmente mortales como el sarampión, que se eliminó en los Estados Unidos en 2000, socava la integridad de las protecciones infantiles que miles de científicos, médicos y funcionarios de salud pública dedicados dedicaron la mayor parte del siglo pasado a implementar".
"Los padres tienen derecho a tomar decisiones informadas sobre la vacunación de sus hijos, pero no tienen el derecho de colocar a sus hijos u otros niños en riesgo de una enfermedad infecciosa grave", ha continuado.
Para abordar estos crecientes riesgos globales, los autores de la Declaración de Salzburgo fundaron el Grupo de Trabajo Internacional sobre Soluciones de Vacunación y Salud Pública (IWG, por sus siglas en inglés) para abogar por, y ayudar a desarrollar, nuevos enfoques para administrar la vacilación de vacunas.