MADRID 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (FACME) reivindicó hoy el papel de los profesionales de enfermería en la actividad clínica asistencial pero pidió que se supere el "debate simplista" suscitado tras la limitación a médicos y odontólogos de la prescripción farmacçeutica, incluida en la Ley de Garantías y Uso Racional de los Medicamentos y Productos Sanitarios aprobada la semana pasada.
A pesar de que FACME se mostró satisfecha con muchos aspectos de la Ley, consideró "poco acertado" que la Ley se centre en la prescripción cuando ésta tan sólo es "una parte del acto médico en su conjunto" como la prevención, el diagnóstico, y el seguimiento de la evolución de los pacientes, como destacó el presidente de FACME, José María Lobos.
Por ello, consideran que el personal de enfermería juega "un papel relevante" tanto en el seguimiento de los pacientes como en el proceso terapéutico en su conjunto, de ahí que se deba establecer "un consenso y un diálogo" entre los colectivos afectados para afrontar los distintos aspectos que quedan por matizar y desarrollar, según FACME.
En cuanto a las competencias profesionales de los farmacéuticos, también destacó el papel que juegan al estar "más cercanos a los ciudadanos". Sin embargo, criticó la "falta de definición de sus competencias" en el seguimiento fármacoterapéutico, ya que puede considerarse una interferencia en la responsabilidad del médico para evaluar la evolución de los pacientes.
La racionalización del gasto público destinado a la prestación farmacéutica que incluye la Ley fue otro aspecto también criticado, ya que consideran que debería evaluarse como "parte del gasto sanitario general". A este respecto, la presidenta de la Sociedad Española de Farmacología Clínica (SEFC), África Mediavilla, señaló que "el elevado gasto de los tratamientos" puede acabar siendo "un ahorro importante".
Sin embargo, FACME también destacó otros puntos muy positivos de la Ley, como la prohibición de la venta sin receta de aquellos medicamentos que la necesiten y el aumento de transparencia en la difusión de los resultados de los ensayos clínicos, o en el acceso público de los informes de evaluación o autorización de medicamentos. También valoró positivamente la prohibición de bonificaciones como "garantía de su independencia profesional".
En este sentido, apoyó también el refuerzo de la política de medicamentos genéricos y de la prescripción por principio activo. José María Lobos señaló que esta medida no coarta "la libertad de prescripción del médico", ya que tan sólo se busca reducir el gasto farmacéutico bajo la independencia de poder elegir "sin el condicionamiento de la marca".