SANTANDER 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Sanidad y Servicios Sociales, Charo Quintana, ha defendido ayer que la Ley de Prevención del Tabaquismo, conocida como 'ley antitabaco', es una normativa "de mínimos", si bien se dará "un tiempo" de aplicación de esta ley estatal antes de promulgar una ley de carácter regional.
Quintana, valoraba, así, el proyecto de reglamento que prepara la Comunidad de Madrid sobre la Ley de Prevención del Tabaquismo, en el que, entre otras medidas, se contradicen algunos elementos de la normativa estatal, ya que en dicho borrador se permite fumar en las cafeterías de los centros de trabajo, en despachos con balcón y actos conmemorativos, mientras que los bares y restaurantes no tendrán que hacer obras para separar las zonas de fumadores.
Para Quintana, sin haber estudiado dicho borrador, la 'ley antitabaco' es "suficientemente moderada, de hecho mucho más prudente que la ley que existe en Irlanda, por ejemplo, o en Italia", según aseguró en declaraciones a Europa Press.
En cualquier caso, para la titular de la sanidad cántabra, "de ninguna de las maneras las comunidades deberíamos de rebajar los objetivos y la aspiración de esta ley", asegurando que "sorprende" que "desde una institución sanitaria", la de Madrid, se "tengan posiciones restrictivas sobre la aplicación de una ley que ha sido ampliamente consensuada y que pude calificarse de equilibrada y de prudente".
Respecto a la posibilidad de promulgar una legislación de ámbito regional, Quintana recordó que aunque se venía trabajando en su redacción, se decidió paralizar este trabajo para "acompasarnos con la ley estatal".
En este sentido, Quintana considera "prudente" otorgar "un tiempo de aplicación de la ley estatal" para abordar "una regulación en nuestra comunidad que sea realista, pero que no olvide nunca que su propósito es mejorar la salud de todos, de fumadores y de no fumadores".
En cuanto a la polémica respecto a la financiación de los medicamentos, Quintana aseguró que es "un gran error" considerar que "financiar el tratamiento antitabaco es igual a financiar los medicamentos que vienen a paliar la privación de la nicotina", sin prestar atención a las terapias para superar "la adicción psíquica".
"El tratamiento antitabaco es mucho más que todo eso, nuestra comunidad está financiando el apoyo a las personas fumadoras que quieren dejar de fumar, y lo está financiando puesto que está incluido en cartera de servicios de Atención Primaria", gerencia en la que, según explicó Quintana, se han "formado a todos nuestros profesionales" para "tratar" a los pacientes que quieran dejar este nocivo hábito.
Así, en Cantabria "el tratamiento antitabaco está financiado", salvo en lo referente a "los fármacos", ya que "el tratamiento farmacológico no es necesario en todos los casos" y posee un balance "beneficios-riegos" que "hay que tenerlo en cuenta", destacando, por último, la próxima puesta en funcionamiento de la Unidad de Deshabituación Tabáquica.
