VALLADOLID, 24 Sep. (EUROPA PRESS) -
El laboratorio de referencia del Hospital de Alcorcón (Madrid) confirmó hoy el tercer caso de la variante humana de la enfermedad de Creutzfeld Jakob, conocida como 'mal de las vacas locas', en la Comunidad de Castilla y León, cuarto que se produce en España, según los datos facilitados a Europa Press por fuentes del Gobierno regional.
Se trata de una mujer que estaba ingresada en el Complejo Asistencial de León, que falleció el pasado mes de agosto y que perdió a un hijo de 41 años aquejado por esta enfermedad en el mes de febrero de este mismo año.
Este nuevo caso se encuentra dentro de las estimaciones posibles para España tras la aparición de la enfermedad de las vacas locas en los años 90.
No obstante, tanto la Administración regional como la central reiteraron la existencia de "plenas garantías" en el consumo de carne de vacuno aunque la Junta, a través de la Consejería de Sanidad, dará traslado del caso a la Comisión de Salud Pública del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, para que sea tratado en su próxima reunión ordinaria.
El caso ha sido notificado a nivel internacional, confirmando que se trata del cuarto caso de la enfermedad nueva variante que aparecía en España y que no tiene consecuencias epidemiológicas, es decir, no ponen en riesgo la salud de los ciudadanos.
CASOS ESPORÁDICOS
La Consejería de Sanidad de Castilla y León y el Ministerio de Sanidad quieren transmitir a los ciudadanos que la aparición de "casos esporádicos" de la enfermedad entra dentro de las previsiones que se hicieron a nivel de toda Europa hace ya más de ocho años, cuando se pusieron en marcha las medidas correctoras, principalmente en la alimentación del ganado, para frenar la aparición de la enfermedad.
Los hechos han corroborado que las actuaciones eran las correctas, ya que en España sólo han aparecido hasta el momento cuatro casos, menos que en otros países europeos, según explicó la Junta.
Previsiblemente algunos casos más pueden producirse en la Unión Europea pero siempre consecuencia de lo sucedido hace ya más de una década.
El periodo de incubación de la variante de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, desde el posible contagio, se estima que es de entre cinco y diez años hasta la aparición de síntomas, lo que supone que en el caso confirmado hoy el contagio se produjo antes de que entraran en vigor las exhaustivas medidas de control establecidas por el Gobierno español, en colaboración con las autoridades europeas y autonómicas, tras la aparición de los primeros casos de vacas locas en el Reino Unido.
En concreto, desde el primer momento se localizaron y prohibieron los piensos de origen animal o con proteínas animales, se estableció el sistema de eliminación de animales infectados, se fijaron las partes cárnicas que no podían destinarse a consumo humano para introducir las máximas garantías en el consumo.
Estas medidas de prevención y control, que siguen vigentes, garantizan que la carne que se consume en nuestro país reúne todos los requisitos de seguridad.
La detección y comunicación de este caso ha sido posible gracias a las medidas adoptadas en su momento.
En España, la vigilancia de las encefalopatías espongiformes de transmisión humana está integrada en la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica. A su vez, España está integrada en la Red de Vigilancia Europea de la enfermedad (EUROCJD).
Existe un Registro Nacional, coordinado por el Centro Nacional de Epidemiología y en cada Comunidad autónoma hay designado un coordinador epidemiológico, al cual deberán ser notificados los casos sospechosos y que a su vez declara dichos casos al Registro Nacional y un coordinador clínico que proporciona al médico notificante tanto el apoyo diagnóstico como el necesario asesoramiento en todos los temas relacionados con la enfermedad.
Desde el Registro Nacional se hace el intercambio de información con la Unión Europea y con la EUROCJD se mantiene una constante coordinación, para que el control de la enfermedad en todos los países se realice de forma homogénea.
Debido fundamentalmente a la aparición de la variante en el Reino Unido, estas enfermedades son objeto de una especial atención en cuanto a su detección, seguimiento, e investigación, teniendo en cuenta que son enfermedades que requieren para su confirmación un estudio anatomopatológico de forma imprescindible.
Desde la Red Nacional de Vigilancia Epidemiológica se hace un seguimiento estrecho de todos los casos de esta enfermedad, y especialmente de aquellos que por sus características pueden ser sospechosos de ser una variante de Creutzfeldt-Jakob, enfermedad de la que existen cuatro tipos: esporádica, familiar, iatrogénica y variante. El cuarto tipo (variante) fue definido en 1996 a raíz de la situación producida en el Reino Unido.
Esta cuarta modalidad de la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (variante) se atribuye al contagio a través del consumo de productos de animales ricos en tejido nervioso que, a su vez, han consumido pienso de origen animal contagiado con priones.