TOLEDO, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Consejería de Sanidad y Asuntos Sociales ha mostrado su voluntad de dialogar para solucionar el conflicto surgido con las clínicas abortistas, a los que adeuda 1,3 millones de euros, aunque ha recordado a estos centros que el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha adeuda a proveedores cerca de 1.100 millones de euros.
De este modo lo han confirmado a Europa Press fuentes de este departamento que dirige José Ignacio Echániz, quienes han indicado que el director gerente del SESCAM, Luis Carretero, se puso ayer en contacto con los responsables de estos centros y les ofreció mantener un encuentro un encuentro en próximos días, aunque las clínicas optaron por hacer público el dinero que se les debe.
Desde la Consejería admiten, no obstante, que estos centros se pusieron en contacto con el departamento que dirige Echániz el pasado mes de agosto, reclamando por escrito una reunión con los responsables del SESCAM para ponerles al tanto de los pagos que el anterior Ejecutivo socialista les debía desde julio de 2010.
La Consejería de Sanidad "intenta atender a todos los proveedores" a los que este departamento del Gobierno regional adeuda 159.000 facturas, algo que se está haciendo de forma escalonada y atendiendo en primer lugar a lo más prioritario, pues según han recordado, hay facturas de hace más de dos años del Gobierno de José María Barreda, con cantidades muy superiores a la que deben a estos centros.
Las siete clínicas que en base a un convenio con el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha practican la interrupción voluntaria del embarazo denuniaron ayer en un comunicado que los impagos por parte del Gobierno regional se remontan a julio de 2010, cuando entró en vigor la Ley de Salud Sexual, Derechos Reproductivos y de Interrupción Voluntaria de Embarazo.
Así lo ha confirmado a Europa Press la portavoz de estos centros, Luisa Torres, quien ha indicado que los "reiterados" impagos se han producido tanto con el Gobierno socialista, como con el actual Ejecutivo 'popular'.
La cantidad que el Servicio de Salud de Castilla-La Mancha adeuda a la clínica Dator, Ginemur, El Bosque, Deia Medica, Cire, Iris y el Instituto Ginecológico Murcia asciende a 1,3 millones de euros, y por ello a partir de este viernes van a dejar de practicar este tipo de intervenciones con Ordenes de Pago a cargo del Servicio de Salud de dicha Comunidad.
Esto no quiere decir que estas clínicas estén en huelga, como ha precisado la responsable de una de ellas a Europa Press, sino que
dejarán de realizar interrupciones que vengan derivadas de la sanidad pública castellano-manchega.
Preguntada sobre el motivo por el que estos centros no han dado la voz de alarma antes, pues llevan sin cobrar desde hace 14 meses, Luisa Torres ha indicado que las cantidades que adeudaban a cada clínica "no eran muy importantes".
Pero, ha indicado, cuando han visto que por parte del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha no ha habido ninguna voluntad de establecer un calendario de pagos para saldar las deudas, los siete centros, de forma conjunta, han decidido hacer pública su situación.