MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, ha puntualizado este martes en el Senado que ni el ministerio ni las comunidades autónomas van a prohibir la bollería y que únicamente se limitará su venta cuando tengan un elevado contenido en calorías. "Se trata de evitar alimentos que tengan escaso valor nutritivo y productos que tengan un alto contenido en sal, azúcar o grasa. Pero si cumplen los requisitos se pueden vender", ha apostillado.
"En primer lugar tengo que decir que a nadie se le va a ocurrir ni se le ha ocurrido, al menos en el Ministerio de Sanidad y Política Social, prohibir la bollería --ha dicho en los pasillos del Senado, a preguntas de los periodistas--. Lo que hemos hecho es un documento de consenso con las comunidades autónomas, asesorados por expertos en nutrición y por las sociedades científicas y teniendo en cuenta las resoluciones del Parlamento Europeo y el Senado, en que se recomienda que los niños en los colegios puedan acceder a productos que ayuden a hacer una dieta equilibrada". Este documento de recomendaciones será aprobado por el ministerio y las comunidades en el Consejo Interterrorial de Salud de mañana.
Así, ha puntualizado que "no se prohíbe la bollería, sino que se limita su venta", cuando se sobrepasan determinado límites nutricionales. "Y eso sólo para los llamados productos envasados. Para los productos que son tipo bocadillo no hay limitación de ningún tipo", ha precisado.
La ministra explicó que se toman estas medidas "porque se ha duplicado el número de obesos en nuestro país en los últimos diez años. Y especialmente preocupante es el caso de los niños por las enfermedades de adultos que nos estamos encontrando en niños , como hipertensión y diabetes".
La ministra también ha descartado otro de los temas que se podrían plantear en el Consejo Interterrorial de Salud de mañana, como el la imposición del copago en el sistema nacional de salud. "El Gobierno no ha planteado eso en ningún momento --ha vuelto a reiterar--. Es más, el propio presidente del Gobierno en el Debate del Estado de la Nación hizo una referencia en el sentido de que no se plantea el copago. Es verdad que algunas comunidades autónomas alguna vez lo han señalado pero el Gobierno no lo ha contemplado en ningún momento".
FACTURA SANITARIA
Por otro lado, la ministra de Sanidad, en respuesta a una pregunta de la senadora de CiU, Rosa Nuria Aleixandre, ha pedido a las comunidades autónomas que contribuyan a la reducción del déficit iniciada por el Gobierno, cuyas medidas adoptadas en materia sanitaria supondrá un ahorro para las comunidades de unos 4.500 millones de euros, "con efectos inmediatos en el presupuesto de este año".
"Ahora le toca a las administraciones autonómicas tomar decisiones", ha aseverado Jiménez, recordando que muchas de las medidas adoptadas por el Ejecutivo "no son de futuro sino que se están aplicando ya", como la reducción del sueldo de los profesionales sanitarios o el recorte en el precio de los medicamentos.
Además, recuerda que a éstas se suman otras medidas previas que también incidían en la financiación de la Sanidad, como la aportación extraordinaria de 11.500 millones de euros aprobada en la Conferencia de Presidentes de 2005 o los recursos adicionales que aporta el nuevo modelo de financiación autonómica.
MEDICAMENTOS HUÉRFANOS
A una pregunta del senador del Grupo Popular Jesús Ramón Aguirre sobre la manera en que afecta la rebaja de precios de los medicamentos innovadores a la investigación sanitaria y en especial a los medicamentos huérfanos, tras pedirle que "sea valiente y deje al margen estos medicamentos en el real decreto para el control del déficit público", la ministra ha asegurado que estas medidas han sido adoptadas de acuerdo con la industria.
"No es una rebaja de precios sino un descuento obligatorio del 7,5% en la venta de medicamentos al Sistema Nacional de Salud que se aplica a toda la cadena farmacéutica --ha recordado--. Esta decisión, que el Gobierno ha tomado a petición de la industria farmacéutica, con la que tenemos contacto permanente, minimiza el impacto en la previsiones de venta del sector en el mercado mundial y también en el privado español con lo permite menor afectación a sus expectativas de retorno a los esfuerzo de I+D+i".
Además, la titular de Sanidad ha apostillado que "esta reducción se queda en el 4% en caso de los medicamentos huérfanos precisamente para preservar al máximo las inversiones en investigación de la industria farmacéutica en estos fármacos" y ha recordado que las medidas son "compartidas con las comunidades autónomas, para el control y racionalización del gasto sanitario".
Finalmente, la ministra ha defendido una vez más en la Cámara Alta las medidas adoptadas por el Gobierno para atender a los afectados por el dimetilfumarato contenido en las bolsitas de gel de silicio para proteger de la humedad a distintos productos procedentes de China, especialmente calzado, sofás o bolsos. Estas personas han sufrido reacciones alérgicas en la piel y vías respiratorias.
Jiménez ha señalado al respecto que, "consciente de grave riesgo para salud de las personas expuesta al dimetilfumarato, ha actuado adecuadamente y con celeridad alertando a autoridades sanitarias de Consumo y ordenando la retirada de los artículos que lo contienen y prohibiendo su entrada en mercado. España ha sido uno de los primeros países en dar la alerta en Europa y uno de los primeros en tomar medidas de protección de los consumidores".
Aunque la senadora del Grupo Popular María Carmen Riolobos ha comentado que, según las asociaciones de afectados siguen produciéndose casos, la titular de Sanidad ha precisando que el Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias ha contabilizado un total de 84 casos, con una última notificación en abril de 2009, "y todos han recibido tratamiento adecuado. Se han tomado medidas legislativas específicas y todos los casos notificados están perfectamente controlados", ha concluido.