MADRID, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -
El diputado de Izquierda Unida (IU) Gaspar Llamazares considera "disparatado" que el Ministerio de Sanidad deba recuperar competencias autonómicas en materia sanitaria tras la alarma social generada por el ébola, como ha pedido la Organización Médica Colegial (OMC), y entienden que el Gobierno debe desarrollar la Ley de Salud Pública aprobada en 2011.
"Sería más partidario de desarrollar la ley existente que no andar inventándose nada o cosas que nadie quiere", ha destacado en declaraciones a Europa Press después de que la entidad colegial haya propuesto quitar competencias a las comunidades y "reprogramar" el papel del Ministerio.
De hecho, ha recordado a la OMC que cuando las competencias estaban centralizadas también se produjeron crisis de salud pública como la del aceite de colza o la de las vacas locas, por lo que esta medida "no es ninguna garantía".
Además, el portavoz de Sanidad de la Izquierda Plural en la Cámara Baja cree que "no se puede generalizar un problema concreto ocurrido con una ministra concreta y un gobierno concreto de la Comunidad de Madrid".
De hecho, entiende que pedir que el Estado asuma competencias que están transferidas a las comunidades supone "lanzar balones fuera" y tratar de que "se eludan responsabilidades", tanto por la titular del ramo Ana Mato como por el consejero madrileño, Javier Rodríguez.
"Parece que hay que salvar a Ana Mato, pero no hay que salvarla porque está quemada, y cuanto más tardemos en sustituirla peor para todos, incluso para el PP", ha defendido este diputado.
Llamazares ha acusado a la ministra de "no haber querido" desarrollar la Ley de Salud Pública aprobada durante la anterior legislatura a pesar de que, con dicha norma, España hubiera contado con una comisión de Salud Pública de ámbito nacional y un comité consultivo, entre otras cuestiones.
"En definitiva, capacidad de coordinación y asesoramiento técnico", ha reconocido, al tiempo que ha acusado al Ministerio de no haberla desarrollado por considerarla "poco menos que roja" y no estar de acuerdo con ella. "El hecho de que el Gobierno haya tenido el sectarismo de no desarrollar la ley nos ha traído malas consecuencias", ha apostillado.