HONG KONG 25 Ago. (Reuters/EP) -
Un grupo de investigadores ha descubierto que al inyectar una bacteria en los mosquitos 'Aedes aegypti', que trasmiten la fiebre del dengue, se puede bloquear la transmisión del virus del dengue y controlar así la propagación de esta enfermedad, según un estudio de la Universidad de Monash (Australia), cuyos resultados han sido publicados en la revista 'Nature'.
Con la inyección de la bacteria 'wolchabia', los mosquitos pasan el virus fácilmente a sus crías, pasando a estar todos libres del dengue. Según los investigadores, los mosquitos infectados deben ser liberados en la naturaleza para que la propagación del dengue a las personas se pueda reducir.
"El principal hallazgo que se vio al inyectar esta bacteria fue su capacidad para reducir la transmisión del dengue", explica el autor principal del estudio y decano de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Monash, el profesor Scott O'Neill, quien además asegura que "se ha visto que se elimina casi por completo el virus del dengue en el cuerpo del mosquito".
En su experimento, el grupo de O'Neill inyectó las bacterias en más de 2.500 embriones de los mosquitos capaces de propagar la fiebre del dengue. Tras el nacimiento de estos insectos, fueron tratados con sangre mezclada con el virus del dengue, y ninguno contrajo el virus. De esta manera han descubierto que "la bacteria 'wolbachia' no se propaga por el medio ambiente, se transmite de madres a hijos a través de los huevos", explica el experto.
"Cuando un mosquito macho copula con una hembra infectada, todos los huevos mueren. Eso le da un beneficio indirecto a las hembras con 'wolbachia' porque cuando se aparean con los machos infectados, los huevos crecen normalmente porque todos sus huevos tienen 'wolbachia' convirtiéndose en algo más y más común con cada generación", detalla el científico.
Según O'Neill, "hay dos teorías para explicar por qué la 'wolbachia' es capaz de bloquear la absorción de dengue. En primer lugar, esta bacteria estimula el sistema inmunológico del mosquito y lo protege de virus como el dengue y, en segundo lugar, compite con el dengue de los alimentos en el interior del mosquito, haciendo que sea difícil la propagación del virus".
INFECTAR POBLACIONES SILVESTRES PARA EVITAR LA PROPAGACIÓN DEL VIRUS
Más de 50 millones de personas en más de 100 países enferman y 20.000 mueren cada año por la fiebre del dengue. En la actualidad, no hay ninguna vacuna o tratamiento específico para la enfermedad. La única forma de prevención es el control de las poblaciones de mosquitos a través de la eliminación de los criaderos y con insecticidas.
El equipo de O'Neill dispuso de cerca de 299.000 mosquitos infectados en más de 370 sitios del noreste de Australia, y la bacteria se propagó entre la población de mosquitos silvestres con éxito, incluso infectando a sus crías en un periodo de tres meses.
El equipo está buscando la aprobación para la liberación de estos mosquitos en los sitios en los que el problema del dengue es endémico como Vietnam, Tailandia, Indonesia y Brasil para ver si se reducen las tasas de transmisión del dengue en las personas.
"Se trata de una estrategia alternativa para el control del dengue que puede ser de bajo coste, sostenible y adecuada llevarla a cabo en las grandes urbes de los países en desarrollo", asegura O'Neill.
Sin embargo, agrega que "cuando pase un tiempo esta estrategia se podría volver menos eficaz, al igual que ocurre con los insecticidas. No se sabe cuánto tiempo podría tardar en ocurrir, pero si se realiza un control eficaz en 20 ó 30 años, podría ser un paso muy importante para controlar el dengue", concluye el investigador.