MADRID, 10 May. (EUROPA PRESS) -
El investigador español Segundo González del Instituto Universitario Oncológico del Principado de Asturias forma parte del equipo científico que ha identificado un nuevo mecanismo que permite a las células cancerígenas escapar del sistema inmune. Las conclusiones de la investigación, que podrían aplicarse al desarrollo de terapias frente a tipos de cáncer muy comunes como el de mama o pulmón, se publican en la edición digital de la revista 'Nature'.
El sistema inmune posee unas células denominadas células asesinas naturales o NK. Se llaman así porque son capaces de reconocer y eliminar de una forma "natural" muchas células tumorales. Uno de los mecanismos que permite a las células asesinas naturales reconocer a las células tumorales consiste en que estas células expresan en su superficie una proteína denominada MICA.
Esta molécula, descubierta por Thomas Spies, del Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson y director del estudio, no se expresa en las células sanas, pero sí en las células tumorales y su expresión permite que el sistema inmune reconozca y elimine las células tumorales. Sin embargo, muchos tumores son capaces de evadir el sistema inmune porque desarrollan mecanismos para escapar de su respuesta.
Según explicó a Europa Press Segundo González, "hemos caracterizado un importante mecanismo por el que las células tumorales escapan al reconocimiento de las células asesinas naturales, así como una nueva interacción de MICA con dos moléculas denominadas ERp5 y GRP78 en la superficie de las células cancerígenas". Según indica el investigador, ERp5 se une a MICA en la superficie de la célula y altera su plegamiento haciendo que MICA sea cortada por acción de una proteasa y liberada en forma soluble al medio extracelular. La ausencia de expresión de MICA de la superficie de las células tumorales impide su eliminación por el sistema inmune. Además la forma soluble de MICA tiene la capacidad 'per se' de suprimir la respuesta inmune.
Para demostrar el papel de ERp5 en la producción de MICA soluble, los investigadores inhibieron su expresión en las células tumorales y observaron que se restaura la expresión de MICA en la superficie de la célula tumoral y también se restaura la capacidad del sistema inmune de eliminar las células cancerígenas.
Este estudio pone de manifiesto un nuevo mecanismo de evasión de la respuesta inmune que utilizan tumores muy prevalentes en nuestra sociedad, como son por ejemplo tumores de pulmón, del aparato digestivo o de mama. Además, explica González, "el estudio demuestra que el bloqueo de la interacción de ERp5 con MICA en la superficie de la célula tumoral permite que el sistema inmune elimine a las células cancerígenas. Esto nos indica claramente que la manipulación de este nuevo mecanismo de evasión de la respuesta inmune puede tener una clara aplicación terapéutica en el tratamiento del cáncer".