MADRID 1 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las gafas de sol homologadas deben adquirirse en establecimientos de óptica para que el especialista pueda aconsejar "el filtro solar más adecuado" para los ojos de cada persona y dependiendo de las actividades que ésta realice.
Así lo recomienda la Asociación Visión y Vida mediante su campaña a través de las redes sociales 'Consejos de salud visual', la cual se prolongará a lo largo de los próximos doce meses. En ella, sus expertos subrayan el hecho de que el uso de estas gafas "es la única forma de prevenir los efectos nocivos de los rayos del sol".
En este sentido, explican que éstos, en especial los ultravioletas UVA y UVB, "penetran en los ojos causándoles daños debido a la acumulación de los mismos". Ésto es así, ya que "son 20 veces más sensibles que la piel", señalan.
De esta forma, una exposición prolongada y sin protección puede causar efectos inmediatos como la fotoqueratitis, que "frecuente en verano", indican. No obstante, sus perjuicios no acabn ahí, ya que a medio y largo plazo es posible que se produzcan alteraciones como "las cataratas, el pterigion, y daños en la retina", afirman.
Por todo ello, insisten en la importancia del empleo de las gafas de sol homologadas, las cuales "no permiten que los rayos pasen a través de las lentes solares". Especialmente relevante es esto en los menores, y es que, sus ojos se están desarrollando y "no tienen la misma capacidad de protección frente a las radiaciones", declaran.
Al respecto, aseguran que "el 90 por ciento de los rayos UVA y el 50 por ciento de los UVB penetran en los ojos de los más pequeños llegando a su retina". Cuando cumplen 12 años, las cifras se reducen hasta el 60 por ciento y 25 por ciento, respectivamente; y "no es hasta los 25 años cuando el cristalino puede considerarse adulto", concluyen.