MADRID 12 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los ingresos hospitalarios por reacciones alérgicas graves en niños se han multiplicado por siete en la última década, según ha mostrado un estudio liderado por las doctoras del servicio de Alergología Infantil del Hospital Universitario La Paz, María Teresa Boyano y María del Carmen García.
Y es que, en España, en los últimos trece años, la frecuencia de sensibilización a alimentos se duplicó, pasando de un 3,6 a un 7,4 por ciento de la población. En concreto, la investigación se centra en la patología de la alergia a alimentos mediada por IgE (Inmunoglobulina E) debido a que es la más frecuente y conocida.
Este tipo de alergia se manifiesta como reacción tras la ingesta del alimento y, en el caso de la alergia a leche de vaca y huevo, suele coincidir con su introducción en la dieta. Así, los tres últimos capítulos se centran en la inmunoterapia oral en alergia alimentaria, reactividad cruzada pólenes-alimentos vegetales y técnicas de análisis de proteínas.
De hecho, los alimentos más frecuentes en la producción de reacciones alérgicas graves son: la leche, el huevo, el cacahuete, los frutos secos, las frutas (rosáceas) y algunas verduras. Además, las alergias al pescado y los mariscos son menos frecuentes pero habitualmente bastante graves.
Concretamente, en Europa continental las alergias más frecuentes en el niño son al huevo, la leche y al cacahuete; mientras en los adultos son más habituales las alergias a la fruta fresca, el cacahuete, los frutos secos y las verduras.
Finalmente, las expertas han recordado que la evolución y pronóstico de estas alergias es bueno para la leche y el huevo, mientras que no lo es tanto para los frutos secos y el pescado.