BARCELONA, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -
Las mujeres embarazadas e infectadas con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) tienen ocho veces más de riesgo de que el feto acabe muriendo en la gestación, según las conclusiones de un estudio realizado por investigadores del Hospital Clínic y de la Clínica Eugin de Barcelona.
El estudio demuestra también que estas mujeres tiene cinco veces más de riesgo de sufrir preeclampsia, un síndrome caracterizado por una presión arterial alta y una elevada eliminación de proteínas a través de la orina que puede poner en peligro la salud de la madre y del hijo.
La investigación, publicada en la revista 'AIDS' y en la que participaron 472 mujeres embarazadas e infectadas por el VIH desde 1985 a 2003, está dirigida por el ginecólogo Oriol Coll y el experto en enfermedades infecciosas Josep Maria Gatell.
Coll aseguró hoy que los factores que provocan estas complicaciones del embarazo y en el caso de la mujer infectada con el virus del Sida es "el tiempo de infección y los años que lleva de tratamiento con antiretrovirales, previo a la gestación".
Según Gatell, la preeclampsia, que puede a la vez incrementar el riesgo de muerte fetal, afecta al 2,5% de embarazadas sanas, pero puede alcanzar al 10% de mujeres infectadas por el VIH y que están esperando un hijo.
Sin embargo, la situación puede prevenirse y tratarse con un seguimiento ginecológico más intensivo para detectar complicaciones.
Una mujer embarazada y que sufre el VIH "puede llegar a visitarse 13 ó 14 veces y someterse a siete u ocho ecografías", aseguró Coll.
En cambio, la mujer embarazada que está libre de esta infección y que tiene una gestación normal visita a su ginecólogo "ocho o nueve veces y se hace una media de tres ecografías", explicó este especialista.
La realidad es que el hecho de que los tratamientos antiretrovirales hayan aumentado la supervivencia de los enfermos de Sida ha provocado una mayor presencia de mujeres en edad fértil que quieren tener hijos.
A diferencia de hace años, el riesgo de que estas mujeres seropositivas puedan infectar al feto "no llega al 1%", por lo que ya no es la preocupación principal que los médicos tienen respecto a este colectivo, señaló Gatell.
Al año se detectan menos de diez casos de infecciones de Sida por transmisión vertical, es decir de madre a hijo, apuntó Coll. La mayoría son de mujeres con el VIH que quedan embarazadas y no siguen ningún tipo de control y tratamientos.
En España existen entre 100.000 y 150.000 infectados por el VIH, de los cuales 30.000 son mujeres, mayoritariamente personas de 16 a 40 años que están en edad fértil y que podrían ser susceptibles de poder tener hijos.
MENOS ÉXITO DE EMBARAZO CON LA FECUNDACIÓN 'IN VITRO'
Este mismo equipo de investigadores ha publicado otro estudio que demuestra que las mujeres embarazadas y que están infectadas por el VIH tienen menos posibilidades de quedarse embarazadas que las sanas al optar por los tratamientos de fecundación 'in vitro'.
Según los responsables de este segundo estudio, publicado en la revista 'AIDS', esta disminución en la tasa de embarazo se corrige cuando la mujer infectada por el VIG recibe un ovocito de una mujer sana, a partir de los programas de donación de óvulos.
Gatell aseguró que las mujeres infectadas por el VIH que se someten a estas terapias y que utilizan óvulos propios tienen "entre un 15 y un 25%" de quedarse embarazadas, frente "al 40 ó 50% de éxito" en el caso de recibir óvulos de mujeres sanas.
El estudio indica que la propia infección del Sida afecta a la calidad de los ovocitos de la mujer tratada contra el VIH, por lo que los problemas de fertilidad serían previos a la fecundación de un hijo y "se asocian a la duración de la infección", según Coll.
Al parecer, estas mujeres tienen un nivel de células de defensa muy bajos, por lo que los especialistas aconsejan a este colectivo que antes de iniciar un tratamiento de fecundación 'in vitro' intenten corregir esta situación a base de medicamentos.
Según estos expertos, la causa de todas estas complicaciones podría ser la toxicidad provocada por la propia evolución natural de infección del Sida o de los medicamentos antirretrovirales sobre las estructuras esenciales de las células del cuerpo.
AMNIOCENTESIS EN EMBARAZADAS SEROPOSITIVAS
La mayoría de mujeres infectadas por el VIH decide tener hijos en edades tardías, por lo que aumenta el riesgo de que el pequeño sufra el síndrome de Down. Hasta el momento, se desaconsejaba que se sometieran a la amniocentesis por el riesgo de infección del feto.
No obstante, el Clínic aplica desde hace cinco años un protocolo para estudiar detenidamente el riesgo de estas mujeres de concebir un hijo con síndrome de Down y en función de ello realizarles una amniocentesis para detectar posibles complicaciones fetales.
Este protocolo se recoge ahora en un artículo publicado en la revista 'Journal of Obstetrics and Ginecology'. El trabajo es el primero en describir un protocolo de actuación de estas características para embarazadas seropositivas.