MADRID, 21 Abr. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha defendido que ninguna administración española, europea o internacional estaba preparada para afrontar las consecuencias de la crisis del Covid-19 y abordar su control. "Nadie es nadie. Es un ejercicio de humildad reconocerlo", ha señalado durante su intervención en el Pleno del Senado.
En una interpelación de Carles Mulet, de Compromís, sobre las medidas que piensa adoptar el Gobierno para blindar la sanidad pública y universal, el ministro ha defendido nuevamente la gestión del Gobierno en la crisis del coronavirus. "Nadie estaba preparado para lo que estamos viviendo. Nadie es nadie, ni en España ni en el mundo", ha afirmado rotundamente.
En este sentido, ha recordado que la gran mayoría de grupos de la Cámara tienen responsabilidad de Gobierno en diputaciones provinciales, comunidades autónomas o ayuntamientos, pero que "todos" intentan hacer lo mejor posible en la lucha contra el Covid-19, incluido el Ejecutivo central. En este contexto, ha señalado que el mundo se está enfrentando a "una epidemia que es la mayor tragedia sanitaria vista en 100 años".
"Este virus no venía con manual de instrucciones. Nadie estaba preparado para afrontarlo. Pero seguramente lo habrán podido hacer mejor. Actuaron tarde y mal, como seguramente la mayoría de CCAA. Han cometido errores de exceso de soberbia, como no cerrar Madrid, que era el epicentro; ser poco ágiles; lanzar mensajes contradictorios; ridículo con la compra de material sanitario, que algunas CCAA han actuado con mayor prontitud y eficacia", ha criticado Mulet.
Illa, en cambio, ha defendido que el Ejecutivo no ha actuado tarde, reiterando una vez más que España ha sido uno de los países que "actuó antes" en la restricción de la movilidad. "El Gobierno de España, a mi juicio, no actuó tarde", ha reivindicado, poniendo en valor, además, la coordinación con las comunidades autónomas en la puesta en marcha de las medidas.
Por otra parte, Mulet ha acusado al Ejecutivo de intentar "cargarse" el modelo autonómico a través del Estado de Alarma, centralizando competencias. "El Gobierno no ha alterado ni quiere alterar el marco constitucional. Somos muy conscientes de que tenemos 17 sistemas de salud y de que la competencia está delegada en las comunidades autónomas", ha valorado, puntualizando que "sería ingenuo" pensar que la pandemia del Covid-19 no está poniendo a prueba el marco constitucional español.
En cualquier caso, ha apuntado que las cinco semanas de Estado de Alarma, con sus fuertes restricciones, "avalan" su necesidad. "Era necesario, nos hemos beneficiado todos. Ni actuamos tarde ni vulneramos el marco constitucional", ha apostillado el ministro.
DEFENSA "ENCENDIDA" DE LA SANIDAD PÚBLICA UNIVERSAL
Sobre el tema central de la interpelación, Mulet ha argumentado que si no se hubieran producido "hachazos" sobre la sanidad pública durante las épocas del PP "la respuesta habría sido mucho mejor". Así, ha lamentado la paradoja de que "luego son los primeros que han acudido a la sanidad pública a salvarse". "La única que funciona para todos es la sanidad pública. Los que defienden el desmantelamiento del estado de bienestar son los primeros que han acudido a la sanidad pública. Únicamente la salud pública nos va a permitir salir siempre hacia adelante", ha argumentado.
En este contexto, Mulet ha lanzado "un reto" al Gobierno: universalizar la sanidad pública. "El hachazo todavía no se ha recuperado. Y miles de personas continúan sin acceso a la sanidad. Dejar a la gente sin atender no es lo más barato. Es peligroso para ellos y para la demás gente", ha dicho. Por ello, ha pedido "blindar" la sanidad pública en la sección primera del capítulo segundo de la Constitución, tomando como punto de partida la Ley de Salud Pública de 2011. Además, ha apostado por transferencias adicionales en sanidad para las CCAA infrafinanciadas, un modelo de financiación "justo", eliminar la tasa de reposición o que se invierta más en personal investigador.
Illa ha defendido la "defensa encendida" de Mulet sobre la sanidad pública, que ha suscrito "punto por punto". "Es quizá la política pública más exitosa que hemos conseguido entre todos en los últimos 40 años. Es nuestro deber reforzarla, mejorarla y cuidarla. La sanidad pública nos ha cuidado a nosotros estos días, es momento de que todos la cuidemos a ella", ha justificado, instando a "dotarla de los medios necesarios y reforzar su papel".
Igualmente, el ministro también ha señalado que la crisis del Covid-19 deja otra "lección": "la necesidad de organismos multilaterales de cooperación potentes", como la Organización Mundial de la Salud (OMS). Así, ha puesto en valor la "necesidad" de fortalecer, por ejemplo, la Unión Europea, ya que "ningún país va a salir en solitario de esta situación". También ha animado a "reforzar" la ciencia": "De esto nos saca la ciencia. Es impresionante el esfuerzo colectivo de los científicos para, a contrarreloj, irnos proporcionando los mecanismos terapéuticos y las vacunas para poder vencer al virus".