Identifican una nueva diana terapéutica para las enfermedades del riñón

Actualizado: lunes, 12 marzo 2012 11:48


MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -

Investigadores la Escuela de Medicina del Hospital Monte Sinaí, en Estados Unidos, han identificado una proteína reguladora que desempeña un papel crucial en la fibrosis renal, una condición que conduce a insuficiencia renal.

Encontrar este regulador proporciona una nueva diana terapéutica para los millones de estadounidenses afectados por insuficiencia renal, según los resultados de la investigación, que ha sido publicada en el último número de 'Nature Medicine'.

Dirigido por el doctor John Cijiang He, profesor de Nefrología, Farmacología y Terapéutica de Sistemas, y el doctor Avi Ma'ayan, profesor de Farmacología y Terapéutica de Sistemas, el equipo de investigación estudió tres modelos de ratón de fibrosis renal: un grupo de ratones contenía proteínas virales de VIH incorporadas en su genoma, al segundo grupo se le inyectó una alta dosis de ácido fólico, y en el tercer grupo, la filtración renal fue bloqueada en un riñón -todos estos factores conducen a la fibrosis renal.

Los investigadores recopilaron material genético de estos ratones y lo compararon con el material genético de ratones sin fibrosis renal. Usando un nuevo algoritmo biológico de sistema computacional y software, llamado Expression2Kinases -desarrollado por el Laboratorio de Ma'ayan en el Monte Sinaí- los resultados de estos experimentos fueron analizados.

Los investigadores observaron entonces que HIPK2, una proteína quinasa, se encontraba altamente activa en los ratones con fibrosis renal. HIPK2 regula la forma en que ciertos genes se expresan, y cuando es altamente activa, conduce a la fibrosis renal.

"Nuestros hallazgos tienen implicaciones importantes para las personas con enfermedades renales", afirma He, "las proteínas quinasas como HIPK2 son dianas terapéuticas muy eficaces".

La alta actividad de HIPK2 en la fibrosis renal fue identificada mediante el modelado de una red de proteínas, utilizando la biología de sistemas de cómputo. Ahora, los científicos del Monte Sinaí intentan desarrollar una droga que inhiba la actividad de HIPK2.