MADRID 5 Ago. (EUROPA PRESS) -
Dos ensayos clínicos internaciones en fase III han demostrado que icatibant, un nuevo fármaco para bloquear la acción inflamatoria de la proteína bradiquinina, resulta seguro y efectivo para el tratamiento de los ataques del angioedema hereditario, según los datos publicados en 'New England Journal of Medicine'.
Actualmente, "no existen muchas opciones para tratar el dolor de los ataques, lo que debilita y condiciona la vida de los pacientes, pero estos estudios han mostrado que icatibant puede mejorar los síntomas y no está asociado con ningún efecto negativo", ha indicado la doctora Aleena Banerji, del Hospital General de Massachusetts y una de las principales investigadoras del estudio realizado en este hospital.
La doctora ha explicado que el angioedema heridatario está causado por niveles bajos o una función muy pobre de la proteína inhibidora de la esterasa c1. Estos pacientes sufren episodios recurrentes de hinchazones provocadas por el fluido que se filtra desde los vasos sanguíneos. La inflamación puede alcanzar la cara, las extremidades y el tracto intestinal, llegando hasta la garganta o la laringe, donde puede ser causa de problemas respiratorios de por vida.
Se estima que afecta a por lo menos una de cada 50.000 personas en el mundo y de momento, los tratamientos se han centrado en prevenir estos ataques y calmar los síntomas.
ACTUALMENTE SÓLO EXISTE UN FÁRMACO INYECTABLE
La Agencia del Medicamento Americana ha aprobado las infusiones de esterasa C1 para su tratamiento y recientemente se ha aprobado también, un fármaco inyectable que inhibe la enzima calicreína para el tratamiento de los ataques agudos. Sin embargo, esta aprobación estipula que el tratamiento sólo puede ser administrado por un profesional sanitario debido al probable riesgo de un choque anafiláctico para el paciente.
Icatibant bloquea el receptor de la bradiquinina, una proteína que dilate e incrementa la permeabilidad de los vasos sanguíneos y produce muchos síntomas de la inflamación. La bradaquinina "media en muchos de los síntomas de esta enfermedad por lo que un fármaco que interfiera en su acción sería un gran candidato para tratar los ataques del angioedema", ha señalado.
El artículo explica que el primero de los estudios (FAST 1), realizado en Estados Unidos, comparó icatibant con un placebo, mientras que el segundo (FAST 2), lo hizo con ácido tranexámico, una medicación oral disponible en Europa.
En ambos, "se obtuvo un alivio rápido de los síntomas en comparación con el medicamento de comparación, con una diferencia mayor en el FAST-2", ha resaltado.
Banerji ha subrayado que esta diferencia entre los estudios se debe a que "en el primero de los estudios el factor de éxito se basó únicamente en el alivio de los síntomas más graves". Además, "también se administraron más dosis de rescate de esterasa c1, lo que pudo ocultar el efecto de icatibant", ha afirmado. En ninguno de los dos se detectaron efectos adversos, por lo que la doctora ha indicado que "resulta muy seguro para los pacientes".
Fabricado por la farmacéutica alemana Jerini, icatibant ha recibido la aprobación para la Unión Europea bajo el nombre comercial de 'Firazyr'.