MADRID 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Federación Española de Hemofilia reivindicó hoy el uso preferente de tratamientos sintéticos (fabricados a través de biotecnología) en lugar de los derivados plasmáticos para eliminar la posibilidad de transmisión de virus emergentes a hemofílicos, por "ser más seguros". Además, reclamaron más atención con motivo del 'Día Mundial de la Hemofilia', que se celebra hoy para concienciar acerca de una enfermedad que afecta en España a más de 7.000 personas, de las cuales 2.500 son portadoras de la enfermedad.
Según los expertos, el tratamiento sustitutivo de esta enfermedad ha sido la administración de Factor VIII y IX procedente, hasta hace poco tiempo, exclusivamente de plasma humano. Esta terapia tiene un costo muy elevado y se administra por vía intravenosa, por lo que requiere de un control sanitario que se realiza a través de las Unidades de Hemofilia, dependientes de los Servicios de Hematología de los Hospitales del Sistema Sanitario Público.
Pese a que este tratamiento ha mejorado la calidad de vida de las personas con hemofilia, en los años 80 trajo consigo la transmisión de enfermedades víricas tales como VIH y Hepatitis B y en los años 90 la Hepatitis C, lo que supuso una grave tragedia para el colectivo de Hemofilia en todo el mundo, según la Federación.
En la actualidad, existen nuevos productos para el tratamiento de las personas con hemofilia, los denominados "factores recombinantes", que al no proceder de plasma humano ofrecen más seguridad frente a las posibles infecciones víricas que pudieran surgir.
Según la Federación, varios Servicios de Hematología de los hospitales españoles actualmente optaron por este tipo de factor recombinante, mientras que otros hospitales se niegan a administrarlo por "razones puramente económicas".
En este sentido, el 'Día Mundial de la Hemofilia', que se celebra hoy bajo el lema "Por un tratamiento seguro y con futuro", aboga por el uso de los tratamientos recombinantes como la insulina, la hormona del crecimiento o el interferón, a pesar de que su coste es superior al de los concentrados plasmáticos.
En concreto, la hemofilia es una enfermedad crónica, de transmisión genética ligada al sexo, que se produce por la falta total o parcial de cualquiera de los factores que intervienen en la coagulación de la sangre. Los afectados pueden sufrir graves hemorragias internas o externas, causadas por pequeños traumatismos.