BARCELONA 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
Profesionales de atención al usuario del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona hicieron volver hoy a sus casas al elevado número de pacientes que esta mañana acudió al centro para recibir visita, pese al incendio que esta madrugada dejó sin suministro eléctrico al edificio central, donde se encuentran las áreas generales de urgencias, cuidados intensivos, unidad de quemados y traumatología.
El hospital advirtió esta mañana de la suspensión de las 1.400 visitas y 60 operaciones previstas para hoy, pero muchos pacientes se dirigieron al centro y acogieron con "sorpresa" la supresión de su consulta, explicaron algunos testimonios a Europa Press.
A primera hora de la mañana, pacientes y algunos familiares se congregaron ante la puerta del edificio central para obtener información. Una de las familiares, María Roca, mostró su desconcierto por desconocer la ubicación de su hermana, que había sido reubicada a otras áreas del centro. "Ha sido trasladada y nadie sabe decirme donde está", indicó a Europa Press.
MÉDICOS VISITAN ENFERMOS EN SALAS DE ESPERA.
No obstante, algunas de las visitas o pruebas diagnósticas que no requirieron el uso de electricidad pudieron ser atendidas en zonas donde había suficientes condiciones lumínicas como salas de espera, donde pudieron verse escenas de médicos auscultando pacientes.
Una de las pacientes del edificio afectado, donde se encontraban 820 enfermos en el momento del incendio, Francisca Cuadrado, que lleva tres semanas ingresada, explicó que en su planta no escucharon el ruido. "Yo no me he enterado nada hasta que me he levantado y he visto a los Bomberos", aseguró.
MOSSSOS REPARTÍAN LINTERNAS.
Durante la mañana, se pudieron ver diversos cuerpos de seguridad rondando por la zona y trabajando para normalizar la situación. Los Mossos d'Esquadra proporcionaron linternas a pacientes y facultativos y, sobre todo, a los que insistían en entrar al centro donde no funcionaban los ascensores.
Por su parte, dos facultativas del hospital se mostraron indignadas por la situación "caótica" vivida en el centro a primera hora de la mañana. Paquita López lamentó que "se ha perdido un día de trabajo porque todo va informatizado". Por ello, consideró "probable que se duplique el personal de guardia durante el fin de semana para recuperar el trabajo acumulado de hoy".
MÉDICOS SE QUEJAN DEL CAOS "TERCERMUNDISTA".
Por su parte, la médico Carmen Vivas indicó que "es sorprendente que en un hospital de la magnitud de Vall d'Hebron se viva una situación tercermundista" como la de hoy.
El bar del hospital también acusó los efectos del incendio, puesto que no se podía dispensar "ni comida fría ni caliente" y se generaron "largas colas" ya que la caja registradora dejó de funcionar. Sólo los cafés fueron trasladados con termos desde otras áreas del hospital, explicó la cajera a Europa Press.
Asimismo, algunos pacientes se quejaron por el "mínimo desayuno" recibido esta mañana, en que se sirvieron cuatro tostadas y un café, a diferencia de otros días.