MADRID, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -
La grelina, una hormona producida en el estómago que ayuda a inducir el apetito, podría también participar en el desarrollo de la dependencia al alcohol,
según un estudio del Instituto de Neurociencia y Fisiología de Gotemburgo en Suecia que se publica en la edición digital de la revista 'Proceedings of the National Academy of Sciences' (PNAS).
Los científicos, dirigidos por Elisabet Jerlhag, descubrieron que la administración de grelina a ratones conducía a un aumento del consumo de alcohol, mientras que el bloqueo de la acción de la grelina reducía su ingesta.
Investigaciones previas identificaron la presencia de receptores de grelina en áreas específicas del cerebro importantes para el reconocimiento de recompensas. Debido a que estos mecanismos parecen mediar en las recompensas de los alimentos y el alcohol, los autores se plantearon que la grelina podría también mediar en la dependencia al alcohol.
Según los autores, la administración directa de grelina en los nódulos de recompensa del cerebro de ratones aumentaba su consumo de alcohol aproximadamente en un 45 por ciento en comparación con ratones que recibieron una solución salina.
El consumo de alcohol también disminuyó cuando los científicos administraron a los animales uno de dos componentes que interferían con las señales de grelina. Según los autores, los ratones con inferiores señales de grelina parecían responder menos a las características de recompensa del alcohol debido a que sus cerebros producían menos dopamina.
Los investigadores concluyen que estos efectos de recompensa del alcohol forman parte del proceso adictivo y que el sistema de la grelina proporciona una nueva diana para los tratamientos farmacológicos frente al alcoholismo.