MADRID, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (GEICAM) llevó a cabo en el último año 16 ensayos clínicos, 5 más que en 2012, mientras que el número de pacientes participantes aumentó un 140 por ciento con respecto al año anterior, hasta llegar a los 1.076 pacientes.
Desde que iniciara su actividad en 1995, este grupo independiente ha puesto en marcha un total de 102 estudios, a los que se sumarán próximamente otros 8 nuevos proyectos de investigación, con los que "se abre una nueva puerta a la esperanza de lograr la cura del cáncer de mama", según han defendido con motivo del Día Mundial contra el Cáncer que se celebra este martes.
A esta labor investigadora hay que sumar la publicación de 33 comunicaciones en congresos científicos nacionales e internacionales, el doble que en 2012, y la publicación de 8 artículos en revistas internacionales, en cuatro de los cuales GEICAM ha sido promotor.
Con cerca de 26.000 nuevos casos anuales, el cáncer de mama sigue siendo la principal causa de mortalidad por cáncer en mujeres en España. Además, el presidente de esta entidad, Miguel Martín, ha recordado que en la actualidad la supervivencia al cáncer de mama cinco años después del diagnóstico ronda el 80 por ciento, lo que hace que esté "cada vez más cerca" el objetivo final de tasa de recurrencia cero.
"Los avances en cáncer, salvo excepciones, se producen por pequeños pasos y no por grandes revoluciones", prosigue este investigador y señala que en los próximos años se prevé que los tratamientos sean administrados "de la manera más conveniente para identificar a la población que realmente se beneficia" para, poco a poco, "ir reduciendo la tasa de recaídas en la enfermedad precoz y ampliando la supervivencia y cronicidad de la enfermedad en la enfermedad avanzada".
Sin embargo, en las dos últimas décadas se ha mejorado progresivamente la supervivencia de estas pacientes en las etapas precoces, además, se ha avanzado mucho en el conocimiento de su biología y en la definición de nuevas dianas terapéuticas, lo que se traduce en más calidad y años de vida para las afectadas de cáncer de mama tanto en las etapas precoces como avanzadas.