BARCELONA 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
El profesor del Departamento de Microbiología de la Universidad de Barcelona (UB) y miembro del Instituto de Investigación en Nutrición y Seguridad Alimentaria de la misma universidad (INSA-UB), Albert Bosch, afirmó hoy en una conferencia que la gripe aviar, "llegará a España", "afectará a aves y desaparecerá en un momento dado".
Esta es la predicción de la situación con más probabilidades de cumplirse, según explicó Bosch en el marco del Salón Alimentaria de Barcelona, aunque también afirmó que los virus son muy difíciles de controlar.
Bosch hizo una exposición tranquilizadora, en la que destacó que lo que era una situación de "alerta" se ha convertido en una "alarma", cuando el salto de la gripe aviar de aves a humanos puede ser "ahora o de aquí a diez años".
El investigador también hizo referencia a que en España existe desde hace unos años un protocolo de actuación para fiebres hemorrágicas, categoría a la que pertenece la enfermedad del ébola, y "nadie pareció asustarse" cuando se creó.
En declaraciones a Europa Press, Bosch reconoció que es muy difícil evitar que una alerta se convierta en alarma, y lo atribuyó al carácter mediterráneo, en un país donde "cuando el Gobierno toma medidas de precaución la gente piensa que pasa algo", hecho que según sus observaciones no pasa en los países del norte de Europa, donde hay más confianza en las autoridades.
Bosch también destacó que la gripe aviar en su estado actual es de "difícil transmisión entre humanos", y que en el caso de que se ingiera algún producto de un ave contaminada, si está cocinado no hay ningún peligro de un posible contagio, ya que "a setenta grados el virus se inactiva".
Desde que en 2003 surgieron casos de gripe aviar en humanos, se han detectado 175 casos en todo el mundo, de los que 95 han acabado en muerte, lo que supone una mortalidad del 50%. Frente a estos datos, Bosch aportó los de otro virus, el chikunguña, para demostrar que hay una excesiva preocupación por la gripe aviar. Este otro virus, que provoca una artritis grave, ha matado a 93 personas en un mes y medio en la isla tropical de Reunión, perteneciente a Francia.