Gripe.- Defensores de la Sanidad Pública tachan a la OMS de "desproporcionada" y de estar "al servicio" de la industria

Actualizado: viernes, 5 febrero 2010 18:29

MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) ha emitido hoy un comunicado en el que tacha de "desproporcionadas" y de estar "al servicio de los intereses de las multinacionales farmacéuticas" las medidas tomadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para hacer frente a la actual pandemia de gripe A.

Según la FADSP, "las connivencias de la OMS con los intereses de las farmacéuticas han quedado patentes", especialmente por "su insistencia en la vacunación, sólo comprensible si se tiene en cuenta que las vacunas ya estaban compradas y que quizás lo que se pretendía era amortizar el gasto".

A este respecto, los responsables de la federación se han mostrado "satisfechos" por la respuesta de los profesionales y los ciudadanos ante la enfermedad. La población "ha demostrado estar en todo momento en la línea de la sensatez y la desconfianza" hacia las vacunas, "a pesar de la propaganda coactiva" de la OMS y los gobiernos, aseguraron.

"Si en un primer momento era entendible un cierto miedo y precaución por tratarse de una enfermedad nueva, a partir de septiembre todas las informaciones de médicos y expertos iban en el mismo sentido: enfermedad con alta difusión y poca gravedad", explicaron.

Para esta asociación, un hecho "remarcable" de la "servidumbre" de la OMS frente a la industria fue "el cambio de definición de pandemia realizado al poco de detectarse el virus A/H1N1, que forzó la declaración de la pandemia a nivel mundial y que ha sobredimensionado la importancia de la enfermedad".

En todo caso, apuntaron, "resulta inexplicable que no se haya utilizado esta nueva definición para otras enfermedades infecciosas extendidas en muchos países como la malaria, la tuberculosis, la bronquiolitis o las infecciones por rotavirus".

En este sentido, la FADSP ha pedido que "los responsables del miedo" dimitan y que se lleve a cabo "una profunda transformación de la OMS", para garantizar que ésta "asume su papel de coordinador de la política sanitaria a nivel mundial, por encima de las presiones económicas y mediáticas".