El Gregorio Marañón, pionero en el mundo al implantar células madre procedentes de grasa en un corazón

Actualizado: lunes, 5 febrero 2007 17:09


MADRID, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

Cardiólogos del Hospital Gregorio Marañón, perteneciente a la red asistencial pública de la Comunidad de Madrid, han logrado implantar, por primera vez en el mundo, células madre adultas derivadas de la grasa del propio paciente para mejorar el bombeo de sangre de su corazón, que no tenía tratamiento alternativo posible.

La intervención duró unas cinco horas y consistió en extraer e implantar las células, purificadas y seleccionadas, a fin de generar vasos sanguíneos nuevos que permitan irrigar correctamente el corazón del enfermo, un hombre de 72 años que fue dado de alta a las 48 horas, informó hoy el Gobierno regional.

El implante se realizó por medio de un catéter que llega hasta el corazón a través de la arteria femoral y que trasportó los 28 millones de células extraídas al paciente.

El procedimiento consiste en la extracción de células madre derivadas de la grasa del abdomen del paciente mediante liposucción, que realizan los cirujanos plásticos, para que los cardiólogos las implanten en el corazón del paciente.

Las células implantadas se transforman en músculo cardíaco y, sobre todo, en nuevos vasos sanguíneos o células vasculares que proporcionarán al paciente una mejor calidad de vida, al mejor la función contráctil o de bombeo del corazón y evitando la angina de pecho.

Las células extraídas de la grasa contienen gran cantidad de células madre y, de ellas, se separa un tipo de células, denominadas mesenquimales, que tienen una gran capacidad de transformación en diversos tejidos. Una máquina específica se encarga de separar la grasa de las células mesenquimales, purificarlas y limpiarlas para administrarlas, sin riesgo, en el corazón del paciente.

PROCESO MÁS RÁPIDO

Una de las novedades de este proceso reside en que es muy rápido con respecto a la utilización de otro tipo de células madre, porque las células derivadas de la grasa no necesitan ser cultivadas durante tres semanas, sino que en dos horas tras la extracción son puestas a disposición de los cardiólogos para realizar el implante.

El implante de células madre en el corazón del paciente se llevó a cabo por parte del jefe del servicio de Cardiología del Hospital Gregorio Marañón, Francisco Fernández-Avilés, y del cardiólogo estadounidense Emerson Perin.

La intervención se ha realizado mediante catéter previo mapeo del corazón para determinar el lugar exacto del músculo cardiaco en el que introducir las células, en un proceso similar al que se practicó en septiembre de 2006 por este mismo grupo del Gregorio Marañón, si bien entonces las células procedían de la médula ósea del paciente y fueron extraídas tres semanas antes de su implantación.

Este proceso, pionero en el mundo en el ámbito de la terapia celular aplicada a la cardiología, se enmarca en un estudio en el que participarán 36 pacientes, con una parte preclínica que se ha llevado a cabo en Houston (Estados Unidos) y una fase clínica que se desarrolla íntegramente en el Gregorio Marañón y en el que participan los servicios de cirugía plástica y cardiología de este hospital madrileño.