SEVILLA 9 Feb. (EUROPA PRESS) -
El director de la Unidad de Cirugía Plástica y Grandes Quemados del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla, Tomás Gómez Cía, admitió hoy que el paciente al que recientemente se le ha realizado el que ya es el segundo trasplante facial de España podría ser objeto de un retrasplante en el caso de que su sistema inmunológico rechazara este primer injerto.
En un encuentro digital con lectores del diario 'elmundo.es', el también coordinador de esta operación explicó, a la pregunta de si se exige algún requisito estético o de edad para levar a cabo un trasplante facial, que, mientras que en el resto de órganos ni siquiera se contemplan, en este caso se precisa que la geometría tridimensional del tejido del donante sean coincidentes con los del receptor.
Además de estas características morfológicas, recordó que la textura de la piel debe ser similar, por lo que para ello se buscan identidad de sexo y un rango de edades similares a la del receptor.
Cuestionado acerca de si participaron médicos residentes en dicha intervención, reconoció que dentro del equipo del trasplante los residentes de quinto año, tanto de Cirugía Plástica, como de Cirugía Maxilofacial, "tuvieron su papel", que fue "relevante".
En cuanto al hecho de si estaba o no garantizado el éxito de la intervención a nivel estético, si corrió peligro la vida del receptor y qué cicatrices o secuelas tendrá el mismo, Gómez Cía aclaró que los resultados de este tipo de cirugías están "en revisión permanente", toda vez que insistió que lo que se autoriza en cada caso "es la realización a esa persona concreta de ese procedimiento concreto".
"En ningún caso se autoriza un programa de trasplante de tejido compuesto en territorio facial", aseguró este especialista, quien explicó que esto es así "porque es necesario acumular más evidencias científicas en más pacientes", entre otros motivos.
En cuanto a qué tipo de quemaduras son las más dañinas para la piel, aludió a varios factores, entre ellos, la extensión, ya que cuanto más superficie corporal dañada peor pronóstico; y la profundidad, puesto que cuanto más penetre el daño peor. Respecto a la localización, detalló que el rostro es mucho más grave que en la pierna.
Por otra parte, y preguntado si cree que algún día sea viable un trasplante de ojo, señaló que la regeneración del nervio óptico, en el hipotético caso de un trasplante de globo ocular, "es un tema en estudio". Con todo, puntualizó que uno de los problemas tiene que ver "con la imposibilidad, al menos por el momento, de la reconstrucción casi célula a célula de las conexiones nerviosas, axones en nuestro lenguaje".