MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino está llevando a cabo gestiones "a todos los niveles" con la Federación de Rusia, con el propósito de que, "a la luz de los informes presentados", reconsidere la decisión de prohibir la exportación de cerdos vivos y carne de porcino a sus mercados.
En un comunicado, el departamento de Elena Espinosa aseguró que las autoridades rusas no han enviado comunicación oficial al Ministerio sobre la aplicación de estas restricciones, ni han detallado el alcance de las mismas.
No obstante, las autoridades españolas han puesto en marcha gestiones para resolver esta situación, y se han dirigido a todos los exportadores españoles que envían estos productos a Rusia, avisando de la posibilidad de que no se permita la entrada de estas mercancías, "con las consiguientes repercusiones económicas, hasta que no se aclare con todo detalle esta cuestión".
Espinosa avanzó hoy en Almería que el Gobierno español ha iniciado contactos por la "vía diplomática" con Rusia para normalizar la exportación de carne de cerdo y productos derivados y consideró que el cierre de fronteras de este país "no se puede justificar con el brote de gripe A (H1N1)" ya que, remarcó, "incluso se ha cambiado su denominación para no crear confusión en el consumidor".
La ministra confirmó que el pasado 30 de abril se remitió a las autoridades rusas la información "complementaria" solicitada, aunque insistió en que prima el criterio hecho público por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que apunta a que "cualquier ciudadano pude consumir carne de cerdo sin ningún riesgo".
La decisión de Rusia ha sido comunicada por el Servicio Federal de Supervisión Veterinaria y Fitosanitaria ruso a sus inspectores veterinarios, "relacionando, contrariamente a las recomendaciones de la OMS, la evolución de la situación epozoótica/epidemiológica de la gripe A/H1N1 con esta cabaña ganadera" y considerando a España como zona de riesgo 2 frente a la enfermedad, recordó el Ministerio en el comunicado.
Debido a ello, desde el 2 de mayo de 2009, la Federación de Rusia ha prohibido la importación de ganado porcino vivo, carne de porcino y productos de su transformación que no hayan sido tratados térmicamente (temperatura de tratamiento no menos de 80º, tiempo no menos de 30 minutos), desde el territorio de España.