Un ginecólogo español publica en el 'New England Journal of Medicine' un nuevo tratamiento para los miomas uterinos

El Doctor Francisco Vázquez
EUROPA PRESS/REMITIDO
Actualizado: lunes, 6 febrero 2012 19:10

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

El ginecólogo lucense Francisco Vázquez ha publicado un artículo en el 'New England Journal of Medicine', la publicación científica con mayor impacto mundial en su ámbito, en el que aborda un revolucionario tratamiento para los miomas uterinos.

En el artículo publica los resultados de un estudio que permitirá aplicar un tratamiento revolucionario para los miomas uterinos, los tumores benignos más frecuentes en la mujer durante su época reproductiva, que ha sido desarrollado por un equipo de investigación internacional en la que ha participado de manera destacada el doctor Francisco Vázquez.

Los miomas uterinos afectan a una de cada dos mujeres después de los 40 años, provocando anemia, debido al sangrado excesivo, además de dolor pélvico, presión pélvica y dolor menstrual, reduciendo la calidad de vida y ocasionando infertilidad en algunos casos.

La eficacia del tratamiento, con acetato de ulipristal, que pertenece a una nueva familia de fármacos, según explica, los llamados moduladores selectivos del receptor de progesterona, se ha confirmado en dos ensayos clínicos multinacionales y multicéntricos, como alternativa a los tratamientos actuales, que son principalmente quirúrgicos.

Los no quirúrgicos que se estaban aplicando hasta el momento han resultado, según precisa, poco eficaces y además sólo se pueden administrar durante un corto período de tiempo, en un máximo de seis meses, provocando unos severos efectos secundarios y sólo útiles para reducir el tamaño del mioma antes de la cirugía. Entre las complicaciones que producen figuran la pérdida de masa ósea y sintomatología menopaúsica intensa, pues suprimen la secreción de hormonas femeninas del ovario.

Sin embargo, el tratamiento con este producto, según resalta, controla rápidamente el sangrado, y, por tanto, la anemia y reduce el volumen y tamaño de los miomas, evitándoles la cirugía a muchas pacientes. Además, disminuye el dolor y mejora la calidad de vida, se tolera muy bien y no produce efectos adversos sobre la masa ósea ni el estradiol (hormona femenina).