García Reboll anuncia que están estudiando que los hospitales públicos asuman el plan de choque si resulta más barato
VALENCIA, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La consejería de Sanidad de la Generalitat valenciana ha cerrado de forma "coyuntural y reversible" un total de 262 camas en la Comunidad Valenciana ante el alto número de plazas que no estaban ocupadas en algunos centros hospitalarios, lo que supondrá un ahorro mínimo de 86.460 euros al día, 2.593.800 euros mensuales, calculado el coste menor real estimado de cada cama en 330 euros.
La secretaria autonómica de Sanidad, Manuela García Reboll, ha presentado este jueves este plan de "optimización" en la gestión de camas de los hospitales de la Comunidad con el que ha aseguro que sin embargo "no va a suponer la merma de la actividad asistencial ni recortes alguno de las prestaciones sanitarias". Asimismo, ha anunciado que están estudiando revertir el plan de choque para que los propios hospitales públicos asuman por la tarde las intervenciones derivadas si resulta más barato.
En concreto, en Castellón se cerrarán 50 camas, un 4,07 por ciento, en Valencia 53 camas, un 1 por ciento y en Alicante 160 camas, un 4,33 por ciento. García ha insistido en que se trata de una medida que se puede revertir en cuanto las camas sean necesarias en cualquier centro.
Así, ha señalado que esta decisión se adoptó al darse cuenta de que no era necesario volver a abrir las camas que se cerraron en verano para optimizar los recursos ante la baja ocupación ya que "ha habido un cambio escenario con un octubre con 34 grados" que está retrasando la aparición de epidemias de gripe.
Con todo, ha garantizado que pese a este cierre de camas en una Comunidad con los más bajos índices de ratio de camas por número de habitantes "no va a haber una merma de calidad" ya que se trata de "adaptarse a índices de ocupación de hostelería, a las temporadas altas y bajas, en función de los cambios de perfiles asistenciales y epidemiológicos".
Además, ha recalcado que el número de camas "no es un indicador de calidad asistencial sino el uso eficiente y ha considerado que la Comunidad Valenciana "ha tenido que espabilar más" que otras autonomías para aumentar su eficiencia, con una potenciación de alternativas a la hospitalización tradicional, por la "falta de financiación".
García ha señalado, ante este alto número de camas que no están ocupadas, que el Hospital de Lliria se abrirá "cuando la situación económica lo permita", mientras que en estos momentos no le parecen "prioritarios" la apertura del resto de hospitales proyectados.
PLAN DE CHOQUE Y PAGO A FARMACIAS
Por otro lado, ha anunciado que la consejería está realizando una contabilidad analística de los costes de que supone derivar pacientes de las listas de espera para ser operados en centros privados para revertir este plan de choque si resulta más barato intervenirlos por las tarde en los centros públicos.
Así, están estudiando qué hospitales están derivando, qué procesos y dónde derivan porque las cifras "parecen demostrar que no es más barato" esta derivación de pacientes ya que "parece que resulta más caro parar la estructura de los hospitales públicos". No obstante, ha aclarado que el informe concluye que si el plan de choque resulta "más eficiente y barato" no tendrán ningún problema en admitirlo, aunque ha matizado intuye que no.
Respecto a los impagos de la factura farmacéutica, ha confirmado que todavía no se ha abandonado el gasto del mes de agosto y ha explicado que están negociando, junto a la Consejería de Hacienda, créditos con los bancos, para poder pagarla en octubre. García ha admitido que señalado que los pagos a las farmacias "puede que se alarguen más" y al respecto ha evidenciado que "en el pero de los casos" se abonarán en enero porque ya se dispondrá del presupuesto del próximo año.
