MADRID, 13 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Escuela Internacional de Ciencias de la Salud, con la colaboración del Consejo General de Enfermería, ha organizado este miércoles un simulacro de secuestro de rehenes por parte de una banda terrorista destinado a futuros enfermeros para saber cómo actuar en este tipo de actuaciones.
Alumnos que se preparan para trabajar en el campo de las Urgencias y Emergencias han participado de este simulacro, en el que han participado efectivos de Protección Civil y Guardia Civil, así como otros cuerpos sanitarios como SAMUR, SAMER, SEAPA o Ambulancias Transmédica.
La acción terrorista a la que se han enfrentado cerca de 300 profesionales implica la atención urgente a las decenas de heridos por el atropello, los que reciben impactos de bala y heridas de todo tipo, que han sido recreadas por parte de especialistas en efectos especiales.
El ejercicio, que es parte del examen final de los alumnos del título de Experto Universitario en Urgencias y Emergencias de la Escuela Internacional de Ciencias de la Salud, persigue que los alumnos salven el mayor número de vidas posibles y consigan clasificar a los heridos para su evacuación a los hospitales. Después, han sido víctimas del fuego de los terroristas mientras atendían a las víctimas del atropello inicial.
"Los enfermeros han tenido que clasificar y asistir a más de 50 víctimas de distinta consideración: desde heridos muy graves, por herida de bala y politraumatismos, a otros con heridas que revestían menos gravedad. En este ejercicio, los profesionales deben superar el caos reinante y dar respuesta en tiempo récord en una situación de máximo estrés. Resulta crucial detectar los heridos críticos y evacuarlos cuanto antes", ha explicado José María García de Buen, que coordina el simulacro junto a Emilio José Muñoz Hermosa, también profesor de la Escuela Internacional de Ciencias de la Salud.
Por su parte, la vicepresidenta del Consejo General de Enfermería y directora de la Escuela Internacional de Ciencias de la Salud, Pilar Fernández, ha asegurado que este tipo de ejercicios "ayudan a coordinar la acción y estudiar qué puede fallar". "Así, cuando haya que enfrentarse a la dura realidad, la diferencia entre que muchas víctimas vivan o mueran es proporcional a la formación y el entrenamiento de los profesionales", ha comentado.