ZARAGOZA 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
La entrada en vigor de la ley antitabaco ha hecho que cada vez sean más las personas que se planteen dejar esta dependencia a través de la terapia sustitutiva con nicotina (TSN). Los fumadores que optan por este tratamiento multiplican hasta ocho veces las probabilidades de dejar de fumar.
Ello plantea nuevas estrategias para mejorar la asistencia a estos usuarios, con más programas de deshabituación y la implicación de todos los agentes de salud. Por formación y accesibilidad, la labor del farmacéutico será clave en esta tarea. Para ello el profesional sanitario más cercano al ciudadano debe ponerse al día sobre las opciones existentes en el mercado. Éste ha sido el objetivo de la conferencia "Manejo del Tratamiento Sustitutivo de Nicotina por el Farmacéutico", celebrada hoy en Zaragoza y organizada conjuntamente por ARAGOFAR, Cooperativa Farmacéutica Aragonesa, y Novartis Consumer Health.
El tabaquismo es un problema sanitario de primera magnitud. Según estudios realizados, en Aragón mueren más de 1.500 personas al año por enfermedades asociadas al consumo de tabaco, cuyo índice en esta comunidad autónomo es del 28,8 por ciento, por encima de la media nacional. Ante esta situación, "es clave potenciar el papel del farmacéutico como educador en salud, por concienciación y formación, capacidad, disponibilidad horaria y porque la oficina de farmacia es un espacio plenamente accesible para el usuario", como señala José Luis Borrego, experto universitario especialista en Tabaquismo.
La aportación de la oficina de farmacia en el ámbito de la deshabituación tabáquica comprende dos vertientes esenciales: la dispensación activa, aportando al usuario información rigurosa sobre los distintos tratamientos existentes gracias al conocimiento que el farmacéutico tiene del mercado; y el desarrollo de programas a la medida de cada usuario, con un correcto uso de la TSN, una motivación adecuada y un seguimiento continuado en el tiempo para conseguir resultados positivos.
Precisamente, Borrego destaca el hecho de que "aproximadamente el 85 por ciento de los fumadores que quieren dejar esta dependencia lo hacen por su propia voluntad y sólo un 5 por ciento consigue abandonarlo. Cuando se recurre a la ayuda profesional con TSN se consigue multiplicar hasta 8 veces las probabilidades de éxito".
Esta terapia es, según el farmacéutico, el tratamiento más seguro, tanto para el fumador como para el profesional sanitario, gracias a la escasa aparición de efectos secundarios. Sin embargo, "hay que enseñar al paciente la mejor manera de utilizar los parches, los chicles o los comprimidos, y ahí es donde el papel del farmacéutico es clave como agente de salud".
"En los últimos meses se ha detectado un aumento en la demanda de consejo y ayuda profesional al farmacéutico, sobretodo en el caso de los fumadores que quieren intentar dejar esta dependencia por primera vez", comenta José Luis Borrego. Con ello también son cada vez más las farmacias que ofrecen programas para ayudar a dejar de fumar.
En el 2005 las ventas de productos de Terapia Sustitutiva con Nicotina (TSN) han aumentado considerablemente un en Aragón. Incremento que también se ha producido en el resto de las comunidades autónomas y que a nivel nacional se ha situado en un 22 por ciento.
