MADRID 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Club de Fumadores por la Tolerancia ha acusado a la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez, de "volver a incumplir sus promesas" al sacar adelante la reforma de la ley del tabaco "sin el consenso de todos los grupos parlamentarios", sino contando sólo con los apoyos de IU y de ERC.
Según ha explicado a Europa Press su portavoz, Javier Blanco, la decisión de Jiménez en este sentido "falta a su compromiso de alcanzar el consenso, de presentar la reforma en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS) y de escuchar a los sectores implicados, pues no va a realizar el estudio sobre el impacto económico de la medida que reclamaron los hosteleros"
Tampoco ha tenido en cuenta a los fumadores, que a través de este club han logrado unas 400.000 firmas contra esta prohibición, "40 por cada una que han conseguido los partidarios de esta reforma, a través del Comité Nacional para la Prevención del Tabaquismo (CNPT)", según ha apuntado Blanco.
A su juicio, esta reforma es fruto "de la contumacia absoluta" mostrada por la ministra con el tema del tabaco y de su costumbre de "retorcer las cifras sobre esta realidad", pues señala que la prohibición total de fumar en los espacios públicos cerrados busca reducir la prevalencia del tabaquismo tras el "fracaso" de la ley de 2006, pero calla" que los únicos países con esta prohibición en Europa --Irlanda y Chipre-- han visto, tras esta medida, aumentar su número de fumadores".
El Gobierno va a presentar la reforma de la ley del tabaco en el Congreso con el apoyo de IU y ERC, lo que constituye mayoría suficiente. Se debatirá en el último Pleno del Congreso del mes de julio para que concluyan los trámites parlamentarios en la tercera semana de septiembre y el 1 de enero de 2011 entre en vigor.
La reforma prohibirá fumar en espacios públicos cerrados, aunque pero permitirá en espacios públicos abiertos, como terrazas, estadios y plazas de toros. Serán excepciones, por considerarse espacios privados, las habitaciones de hotel reservadas a tal efecto; las cárceles, donde se habilitarán lugares especiales, y los clubes de fumadores. Sin embargo, no se va a permitir fumar en actos sociales como bodas, comuniones o bautizos, al considerarse espacios públicos cerrados.