MADRID, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los participantes en el VIII encuentro del Foro Iberoamericano de Entidades Médicas (FIEM), reunidos en Santiago de Compostela, han aprobado una 'Declaración sobre Violencia de Género' en la que, entre otros aspectos, exigen intensificar las respuestas gubernamentales y sociales contra la violencia de género.
Además, destacan la necesidad de realizar un abordaje "multidisciplinario integral", tomando en cuenta las etnias y realidades de cada país y, a su vez, respetando los derechos humanos y asegurando la "mayor y más amplia" participación de los gobiernos y las poblaciones.
Un abordaje que, a juicio de los expertos, debe incluir entre otras, intervenciones en el área social, cultural, educativa, sanitaria, económica, política, policial y judicial.
Asimismo, en la Declaración se pone de manifiesto que, aunque se ha avanzado bastante, sin embargo, las respuestas son "insuficientes" para la magnitud y trascendencia del problema.
También, los firmantes, se comprometen a profundizar, dentro de la carrera de Medicina, al conocimiento de la violencia de género desde la formación inicial hasta la profesionalización para tomar las medidas de prevención y corrección pertinentes, estableciendo un Observatorio de violencia en los países integrados en FIEM, que facilite su denuncia y registro.
"MANIFESTACIÓN INACEPTABLE DE DISCRIMINACIÓN"
"La violencia de género es todo acto de violencia por razones de sexo o género que tenga o pueda tener como resultado un daño o sufrimiento físico y psicológico para la mujer, así como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad, tanto en la vida pública como privada. Constituye una manifestación inaceptable, por cualquier sociedad democrática, de discriminación, desigualdad e inequidad", señalan en el texto.
Y es que, a su entender, el derecho a la protección de las personas vulnerables es parte del derecho a la salud y, por tanto, la protección ante el maltrato y la violencia de género hacia las mujeres debe constituirse en una obligación del sector público.
"Las respuestas gubernamentales y sociales frente al problema de violencia de género van avanzando, sin embargo son insuficientes y de poco impacto para la magnitud y trascendencia del problema. Las políticas públicas y programas existentes, requieren mejoras para que incidan sobre los sectores más vulnerables desde el punto de vista social, cultural, educativo, sanitario y económico", zanjan.