MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE) presentó hoy un informe sobre el impacto económico real que supondrá la entrada en vigor de la Orden ministerial de los nuevos Precio de Referencia a partir del 1 de marzo, y que conllevará a que cada oficina de farmacia pierda al año un total de 11.550 euros de beneficio bruto. Por ello, los farmacéuticos insistieron en exigir un "periodo de convivencia" para adaptar el cambio de precios y alertaron de los problemas de desabastecimiento que se producirán en las farmacias con los productos afectados.
En este sentido, y según el estudio realizado por la FEFE, el impacto real que supondrá la implantación de los nuevos precios de referencia será de 875,4 millones de euros, en lugar de los 640,2 millones que había previsto el Ministerio de Sanidad y Consumo como ahorro global para el Sistema Nacional de Salud. Esto supone un impacto económico un 36,7 por ciento superior al previsto por el Gobierno, que en sus cálculos no tuvo en cuenta "todo el mercado del medicamento", sino sólo el impacto sobre los medicamentos con receta de la Seguridad Social, "sin el resto de regímenes y el mercado privado", según afirmó hoy la presidenta de esta entidad, Isabel Vallejo.
De estas cifras, el impacto previsto en la Memoria de la Orden Ministerial para las farmacias era de 169,3 millones, si bien la FEFE estimó que si se tienen en cuenta los otros regímenes de la Seguridad Social, como MUFACE, ISFAS y MUGEJU, la pérdida de beneficios para las oficinas de farmacia será de 206,5 millones de euros. Del mismo modo, y según sus cálculos, el impacto para los laboratorios se estima en 560 millones (más de 150 más de los previstos por el Ejecutivo), mientras que para los almacenes sería de 42 millones de euros.
Por ello, indicaron que la Orden tendrá "una gran incidencia" en el gasto farmacéutico al afectar de forma directa por los precios de referencia y descenso del 20 por ciento a un total de 4.890 formatos, mientras que de forma indirecta afectará a la mayor parte del resto de productos al obligar a la sustitución por los de menor precio en el caso de la prescripción de principio activo.
Al mismo tiempo, Vallejo volvió insistir en la necesidad de fijar un "periodo de convivencia de precios" tanto en las farmacias como en la distribución, tal y como ya sugirieron durante las negociaciones previas a la publicación del texto normativo. Al no haberse concedido, advirtió de la posibilidad de que se produzca un fenómeno de desabastecimiento generalizado de los productos afectados, "al adquirir el 28 de febrero a precio antiguo y tener que dispensar el 1 de marzo con precio nuevo", añadió.
Según su opinión, se trata de "una falta de previsión" producida al no haber tenido en cuenta "ni a farmacéuticos ni a los laboratorios", algo que indirectamente puede afectar también a los propios ciudadanos, dado que las oficinas de farmacia se verán obligadas a devolver "aquellos productos que no puedan vender al precio al que podrían haberlo hecho cuando lo compraron", según Vallejo.