Un fármaco contra la hepatitis B provoca resistencia a los fármacos del VIH, según un estudio

Actualizado: miércoles, 28 febrero 2007 22:01


MADRID, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

Un fármaco antirretroviral muy utilizado en el tratamiento de las infecciones hepáticas en la hepatitis B, el entecavir, conduce a una resistencia cruzada con otros fármacos antivirales utilizados en el tratamiento del virus del Sida, según un estudio de la Universidad Johns Hopkins que se ha hecho público durante la Conferencia 2007 sobre Retrovirus e Infecciones Oportunistas celebrada en Los Ángeles (Estados Unidos). La infección por hepatitis B ataca el hígado y puede conducir a cirrosis, cáncer o incluso fallo hepático.

Según los investigadores, que ya han informado a la agencia estadounidense (FDA) de sus descubrimientos, las implicaciones son graves en el caso de los más de cuatro millones de personas en todo el mundo infectadas por ambos virus y tratadas sólo de hepatitis B.

Las buenas noticias, señalan los autores del trabajo, al menos indican que los pacientes infectados por ambos virus que ya toman terapia contra el VIH pueden seguir utilizando entecavir para el tratamiento de la hepatitis B, las malas que ahora existen menos opciones para tratar sólo esta afección.

El fármaco, comercializado por primera vez en el año 2005, ha sido un tratamiento de primera línea en las formas crónicas de hepatitis B, que pueden ser letales para una cuarta parte de los enfermos si no se trata. La información contenida en el folleto afirma todavía que no tiene efectos clínicos sobre el VIH.

Según explica Chloe Thio, autor principal del estudio, algunos pacientes con ambos virus prefieren tratar sólo la hepatitis B cuando el VIH aún no ha debilitado su sistema inmune, evitando así los efectos secundarios de los fármacos para el VIH.

Los investigadores descubrieron tanto en pruebas de laboratorio como clínicas que durante seis meses de terapia de entecavir, se desarrolla una mutación del VIH denominada M184V. Según Thio, los virus con esta mutación se conocen por su resistencia a la lamivudina (3TC), un fármaco que evita la replicación del VIH y una piedra de toque de la mayoría de las combinaciones farmacológicas utilizadas en el Sida.

Debido a que la lamivudina está en la misma categoría de terapias del VIH que otro fármaco también muy utilizado, la emtricitabina, su eficacia se ve también comprometida por entecavir.