MADRID, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Farmacia Rural (SEFAR) avisa de que estos establecimientos están "condenados a desaparecer" en España dadas las actuales condiciones que tienen actualmente, con menos ingresos y más gastos de explotación, de ahí que pidan un fondo estatal que les ayude a compensar su déficit.
Así lo ha reclamado su presidente, Francisco Javier Guerrero García, durante las II Jornadas Nacionales que se han celebrado este fin de semana en Madrid, en las que han puesto de manifiesto los problemas de subsistencia que tienen las oficinas de farmacia de los municipios más pequeños para proponer posibles soluciones.
En concreto, SEFAR asegura de que 1.078 de las 21.427 oficinas de farmacia que hay en España se encuentran en municipios con menos de 500 habitantes, y en torno a 1.024 están en pueblos de entre 500 y 1000 habitantes.
El problema, ha reconocido Guerrero García, es que "las poblaciones van en retroceso, los ingresos son cada vez menores y los gastos de explotación se comen posibles ganancias debido, entre otros motivos, a un sistema de retribución dependiente del precio de los medicamentos, continuamente a la baja, y que además no contempla las particularidades de estas farmacias".
De hecho, avisan de que de seguir así las cosas muchos de estos establecimientos podrían desaparecer, lo que afectaría a más de 2.100 municipios y a un mínimo de medio millón personas.
Entre sus propuestas ante esta situación, la SEFAR reivindica la implicación directa y activa de las administraciones públicas, ya que en la actualidad ya existe un sistema de retorno a la Administración por el que las farmacias con un nivel de facturación superior a 37.500 euros mensuales, deben abonar un porcentaje a la Administración Pública, dinero que se recauda "por el momento, sin carácter finalista", según ha puntualizado Guerrero García.
Por ello, piden la creación de un fondo cuyo destino sea compensar el déficit de ingresos de las farmacias rurales, dando así continuidad a la creación de un índice corrector de los márgenes para las citadas oficinas de farmacia (rurales) inversamente proporcional a su facturación con cargo a fondos públicos.
EN DEFENSA DEL INTERÉS GENERAL
En este punto, el presidente de SEFAR recuerda además que "el déficit de este tipo de farmacias se debe exclusivamente a su ubicación en lugares con menos población, y que a su vez responde al cumplimiento de la ley, para velar por el interés general y asegura la viabilidad de estas farmacias esenciales".
"Existen comunidades donde predominan las farmacias con una gran facturación, mientras que hay pocas farmacias pequeñas y rurales, por lo que en principio la aportación que se tendría que hacer desde el fondo para las oficinas rurales no sería excesiva y este fondo no se resentiría", según propone.
Sin embargo, en otras comunidades como Castilla y León, el conjunto de sus farmacias no presentan un volumen de facturación elevado y hay gran cantidad de farmacias pequeñas y rurales, por lo que dicho mecanismo "sería deficiente y por tanto inviable".
Para SEFAR, "sólo con una visión global que persiga el objetivo de garantizar la viabilidad del conjunto de la red asistencial se propiciaría el equilibrio entre comunidades, y el de la propia red de oficinas de farmacia, manteniendo su principal seña de identidad, el acceso universal para la población".