Santa Cruz de Tenerife, 25 Feb. (EUROPA PRESS) -
Más de la mitad de las ventas de plantas se realiza en las herboristerías españolas mientras que en el resto de Europa el 90 por ciento de adquisiciones de este tipo de productos a base de especies vegetales se produce en la farmacia. Así lo manifestó Olivier Ricq, miembro del Consejo Directivo de anefp, durante la mesa redonda El nuevo escenario de las plantas medicinales en España celebrada ayer durante las XI Jornadas de Medicamentos para el Autocuidado de la Salud y Parafarmacia de COFMANEFP.
Según Ricq, hasta finales del siglo XIX el 60 por ciento de los medicamentos estaban basados en las plantas medicinales y la farmacia era el canal lógico de distribución. Sin embargo, desde los años 60, la apertura progresiva de herboristerías relegó a un segundo plano a las oficinas de farmacia, que durante dos décadas "han recibido muy poca oferta de productos basados en plantas medicinales porque pocos fabricantes apostaban por este canal".
Actualmente 15 laboratorios venden cerca de 350 medicamentos de plantas medicinales en más de veinte mil farmacias y 200 fabricantes distribuyen alrededor de 4000 especies vegetales en más de tres mil herbolarios, según señaló Ricq, quien está convencido de que esta situación puede mejorar con nuevas normas que regulen los criterios de calidad para este tipo de productos. Esta calidad empieza en "la propia plantación y cuidado de los vegetales y pasa por toda su elaboración hasta llegar a los canales de distribución".
Con el cumplimiento de todos los procedimientos, según el miembro de anefp, se podrá garantizar la eficacia del medicamento, ayudar a recuperar la confianza de los pacientes y aumentar el protagonismo de las plantas medicinales en el arsenal terapéutico de la farmacia.
La transposición de la Directiva 2004/24 dirigida a las plantas medicinales es la esperanza de expertos como Gloria García Lorente, miembro de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), que ve en ella el camino para alcanzar una igualdad dentro del ámbito europeo en el reconocimiento de las plantas como medicamentos y mejorar su calidad. Durante el coloquio, García Lorente aseguró que en esta transposición, el Comité de Medicamentos de Plantas tiene encomendado elaborar y decidir una lista con las sustancias, preparados y combinaciones vegetales que pueden formar parte de un medicamento tradicional de plantas. La lista tendrá que especificar la parte de la planta utilizada, la dosis concreta, la vía de administración y toda la información necesaria para un uso seguro.
Además, entre los retos que se plantean los expertos está alcanzar una seguridad jurídica tanto para las empresas como para sus productos. Según Camil Rodiño, Secretario General de la Asociación Española de Fabricantes de Preparados Alimenticios Especiales, Dietéticos y Plantas Medicinales (AFEPADI), los criterios para diferenciar si una especie vegetal se trata de un medicamento o de un complemento alimenticio no están claros para todos, ni para consumidores, ni para las industrias. El Secretario General de AFEPADI añadió que las listas "no deben ser cerradas para poder sumar todo lo que surge de las continuas investigaciones. El trato del medicamento deber igual para todos, ya sea producto español o no y sobretodo tienen que tener transparencia". De esta forma, "se podrá normalizar el mercado de las plantas medicinales y obtener una mayor seguridad para el consumidor", concluyó Rodiño.