MADRID 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las deficiencias en vitamina D en las mujeres premenopáusicas podrían aumentar el riesgo de desarrollar hipertensión sistólica en los siguientes 15 años, según un estudio de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Michigan en Ann Arbor. El trabajo se ha hecho público durante la conferencia anual sobre hipertensión de la Asociación Americana del Cáncer que se celebra estos días en Chicago (Estados Unidos).
Los investigadores examinaron a mujeres que participaban en el estudio sobre metabolismo y salud ósea de Michigan y analizaron datos de 559 mujeres caucásicas que vivían en la localidad de Tecumseh. El estudio comenzó en 1992 cuando las mujeres tenían entre 24 y 44 años y una media de edad de 38 años.
Los científicos registraron la presión sanguínea anualmente durante el estudio. Midieron los niveles de vitamina D en sangre en una ocasión en 1993 y los compararon con las medidas de presión sanguínea diastólicas tomadas en 2007.
Las mujeres premenopáusicas que tenían deficiencias en vitamina D en 1993 tenían tres veces más riesgo de desarrollar hipertensión sistólica en los siguientes 15 años en comparación con aquellas que tenían niveles normales de vitamina D. La presión sistólica es la presión de la sangre en los vasos sanguíneos cuando el corazón late.
Según explica Flojaune C. Griffin, coautor del trabajo, "este estudio difiere de otros porque estamos examinando un periodo de 15 años, un seguimiento más largo que otros muchos estudios. Nuestros resultados indican que la deficiencia temprana de vitamina D podría aumentar el riesgo a largo plazo de hipertensión en mujeres en la mitad de su vida".
Al inicio del estudio, el 2 por ciento de las mujeres había sido diagnosticada o estaban siendo tratadas de hipertensión y un 4 por ciento adicional de las mujeres no habían sido diagnosticadas de hipertensión sistólica, definida como 140 milímetros de mercurio (mm Hg) o más.
Sin embargo, 15 años después, el 19 por ciento de las mujeres había sido diagnosticada o estaban siendo tratadas por hipertensión y un 6 por ciento adicional tenía hipertensión sistólica no diagnosticada.
La Vitamina D tiene un papel bien conocido en la salud ósea. Otra investigación reciente indica que las deficiencias en vitamina D en mujeres podrían aumentar el riesgo de algunos cánceres y tener un impacto negativo sobre el sistema inmune y las enfermedades inflamatorias.