MADRID, 14 May. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) ha criticado la propuesta del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad de flexibilizar la política de incompatibilidades del personal sanitario, para así hacer posible la doble dedicación y aliviar el "grave problema de escasez" de profesionales de algunas categorías.
A su juicio, este "no es ese el camino a seguir", salvo que la pretendida colaboración público-privada busque otros objetivos de "privatización" y abrir así las puertas a una competitividad y conflicto de intereses "más a tono" con el mundo empresarial que con los servicios públicos.
"Al parecer, las comunidades autónomas no quieren imponer criterios más rígidos en las normativas de incompatibilidades del personal del Sistema Nacional de Salud, ante la medida presentada por el Grupo de Trabajo constituido por el Ministerio de Sanidad de Dolors Montserrat y que va a poner en marcha 13 líneas de actuación que ha consensuado con las comunidades autónomas para la planificación adecuada de las necesidades de personal médico", ha dicho la organización.
En este sentido, y a pesar de que reconoce que uno de los retos más importantes que afronta en estos momentos el sistema público de sanidad es el de la planificación de los recursos humanos en un escenario de escasez de los mismos, la FADSP ha calificado de "nefasta política de personal" la seguida por las administraciones, la "cicatería" en la cuantificación de la oferta de formación MIR y su "escandalosa" ausencia de previsión, dado que salen a concurso, dotadas económicamente, unas 2.000 plazas de formación menos de las acreditadas.
"En ningún caso se puede justificar el modificar la normativa de las incompatibilidades del personal médico en el Sistema Nacional de Salud para flexibilizar la vinculación del profesional a su centro, y permitir así el atender necesidades de otros y diversos dispositivos asistenciales de titularidad privada", ha dicho la organización.
Al parecer, prosigue, los núcleos de pensamiento privado (y privatizador) no sólo "no están suficientemente satisfechos" con el actual crecimiento de beneficios obtenido al "parasitar y precarizar" el sistema público, sino que ahora le quieren dar otra vuelta de tuerca a la situación y buscan apropiarse de sus recursos humanos, los que se han formado profesionalmente con fondos públicos y en centros públicos.
En estos momentos en los que se constata la "escasez" de algunas categorías profesionales, es cuando las administraciones sanitarias de las comunidades autónomas de la sanidad pública, apostando por preservar la "independencia, sin conflicto de intereses", de los profesionales formados con fondos públicos.
"Nos parece que la única solución ante esta situación pasaría por incentivar a los profesionales y fidelizarlos y retenerlos en el sistema público, cuestión sólo se conseguiría aplicando la dedicación exclusiva de todos los profesionales del sistema público, pero incentivando generosamente determinados puestos de trabajo, así como otras circunstancias como la penosidad del puesto, el difícil acceso, el aislamiento, la dificultad de promoción profesional, la escasez de mecanismos de formación e investigación", ha zanjado.