MADRID, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP) ha informado del aumento de la financiación de la Atención Especializada (AE) en España entre 2010 y 2020, pero advierte de una mayor financiación del sector privado, es decir, de un aumento de la privatización, así como del gasto farmacéutico hospitalario.
En concreto, se ha producido un incremento del 29 por ciento en el gasto por habitante en Atención Especializada entre el periodo comprendido entre 2010 y 2020, que va desde el 35 por ciento en Castilla y León al 14 por ciento en Castilla-La Mancha. En el año 2020, el gasto en euros por habitante tuvo su máximo en el País Vasco (1.333,32 euros) y el mínimo en Andalucía (919,59 euros).
El porcentaje de gasto en AE sobre el gasto sanitario total también aumentó un 11 por ciento, y este aumento estuvo entre el 16 por ciento en Castilla-La Mancha y el 2 por ciento en Murcia. En 2020, el porcentaje osciló entre el 69,66 por ciento de Madrid y el 57,02 por ciento de Extremadura (promedio 63,64%).
Asimismo, en este periodo, el gasto en conciertos aumentó globalmente (13%), pero presentó una mayor dispersión, entre el -28 por ciento de Valencia y el 106 por ciento en Baleares. El porcentaje de gasto sanitario total dedicado a conciertos en 2020 fue del 8,46 por ciento en España, y oscilaba entre el 23,61 por ciento de Cataluña y el 2,73 por ciento de Castilla y León. Asimismo, las altas financiadas públicamente disminuyeron en un 13 por ciento globalmente (entre el -25% de Andalucía y el 2% de Navarra).
RECURSOS
Por otro lado, el número de camas instaladas por 1.000 habitantes es bajo en el país y ha disminuido entre 2010 y 2020, de 3,43 en 2012 a 3,24 en 2020 (0,19 menos/1.000 habitantes). El número de camas en funcionamiento es aún menor, lo que contrasta con los promedios de la Unión Europea (5,21) y la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (4,4), por lo que "el déficit de camas hospitalarias es preocupante", advierten desde la Federación. Las camas de media y larga estancia son pocas y disminuyeron en este periodo (de 0,32 a 0,27/1.000, frente al 1,5/1.000 de promedio de la UE.
Asimismo, la dotación tecnológica en el periodo aumentó, tanto en los centros públicos como en los privados, aunque más en los primeros: 20 por ciento frente al 8 por ciento por millón de habitantes. El personal de AE también aumentó un 15 por ciento en este periodo y en todas las CCAA.
Además, según el informe, el personal de los centros públicos por cama es significativamente mayor que en los privados: personal total 4,83 versus 2,57 (1,87 veces más); médico 0,9 versus 0,36 (2,5 veces más); enfermería 1,44 versus 0,64 (2,25 veces más).
ACTIVIDAD Y FUNCIONAMIENTO
Además, se produjo una disminución en la tasa de consultas por 1.000 habitantes del 13 por ciento. Las comunidades en las que más disminuyen son: Aragón (-18%), Castilla y León (-20%), Castilla-La Mancha (-19%) y Navarra (-18%); mientras que las comunidades con menos decrecimiento en las consultas son: Andalucía (-9%), Cantabria (-7%) y País Vasco (-4%).
En lo que respecta a las intervenciones quirúrgicas urgentes, disminuyó en un 12 por ciento en 2020, debido a la pandemia, pues muchas intervenciones quirúrgicas se cancelaron o se retrasaron, ya que se dio alta prioridad en combatir y erradicar la pandemia.
Asimismo, el número de partos disminuyó en todas las CCAA, al igual que el porcentaje de cesáreas, pasando del 25,26 por ciento en 2010 al 24,23 por ciento en 2020, pero no en todas las CCAA, aumentando en 4 (Andalucía, Castilla-La Mancha, Extremadura y La Rioja). La tasa de cesáreas en 2020 oscilaba entre el 31,89 por ciento en Extremadura y 14,79 por ciento en el País Vasco. "Esto es excesivo, ya que la Organización Mundial de la Salud recomienda que se sitúe por debajo del 15 por ciento, algo que únicamente ocurre en el País Vasco", según ha destacado el presidente de la FADSP, Marciano Sánchez Bayle.
La evolución de las tasas por 1.000 habitantes de algunas pruebas diagnósticas frecuentes se ha visto que todas ellas aumentaron en este periodo. La prueba que más se utilizó en 2020 es el TAC, con una tasa de 109,02/1.000 habitantes, en segundo lugar, la resonancia magnética (69,02/1.000) y luego las mamografías (42,58/1.000).
Según el informe, de nuevo se constata "una gran variabilidad" entre CCAA en 2020: el TAC oscila entre 121,1 en Madrid y 81,2 en Murcia; el SPECT entre 8,22 en Extremadura y 0,54 en Murcia; la resonancia magnética entre el 111,8 en Madrid y el 34,24 en Murcia; el PET entre en 7,27 en Navarra y 2,09 en Castilla y León; las mamografías entre el 80,67 en Asturias y el 19,2 en Murcia; las angiografías entre el 5,35 en Cantabria y 0 en La Rioja; y la gammagrafía entre el 10,88 en Canarias y el 2,28 en Extremadura. No existen estudios sobre adecuación de las indicaciones de las mismas.
LISTAS DE ESPERA
Además, el informe advierte del aumento "importante" de las listas de espera, tanto de lista de espera quirúrgica (LEQ) como de consultas externas de AE(LECE). Evidentemente las cifras más recientes están influidas por la pandemia que ha suspendido muchas intervenciones quirúrgicas y consultas externas en prácticamente todas las CCAA, aunque con una intensidad variable.
Por lo tanto, la población en ambas listas de espera ha aumentado, así como la demora media y el porcentaje que espera más tiempo (más de 6 meses en LEQ y más de 60 días en LECE), si bien las demoras son presumiblemente mucho mayores porque alguna comunidad autónoma. "Madrid simplemente ha borrado de las listas de espera las personas que vieron suspendidas su citas y ha vuelto a contar las demoras desde que se les asignó una nueva cita", advierten en el informe.
GASTO FARMACÉUTICO
Entre 2014 y 2021 se produjo un aumento del 44,34 por ciento en el conjunto del país, incremento muy superior al del gasto sanitario hospitalario. En 2021, el gasto per cápita en farmacia hospitalaria fue de 200,68 euros por persona y año, oscilando entre 222,75 euros en Castilla y León y 149,85 euros en País Vasco. "El importante aumento del gasto farmacéutico hospitalario ha sido muy superior al incremento del gasto en AE", ha advertido el presidente de la FADSP.
A su juicio, es preciso "contener el gasto farmacéutico". "No puede ser que crezca el doble de lo que crece la asistencia, ya que se come todo el aumento presupuestario. El gasto debe crecer por debajo del incremento del precio presupuestario, como mínimo un punto por debajo", ha opinado Sánchez Bayle.
Finalmente, la FADSP ha propuesto una serie de recomendaciones, entre las que se encuentra. La primera es que el gasto en Atención AE no debería superar el 60 por ciento del gasto sanitario público. "Esto es así siempre y cuando se cumplan las 3 condiciones siguientes: un aumento del gasto sanitario público de en torno a 1.000 euros por habitante y año, para así nivelarnos con el promedio de la Unión Europea; reducir el gasto farmacéutico hospitalario para así colocarlo por debajo del 14 por ciento del total del gasto en AE ya que actualmente se encuentra en el 17,62 por ciento, y disminuir el gasto destinado a las privatizaciones.
Asimismo, instan a incrementar "de manera importante" el número de camas hospitalarias con el objetivo de conseguir entre 4,5 y 5 camas por cada 1.000 habitantes, lo que supone entre 50.000 y 80.000 camas en todo el país. También es necesario que en ninguna Comunidad Autónoma haya menos de 3,5 camas por 1000 habitantes.