Respecto al copago sanitario, Franco destaca que "es una posibilidad más, de entre otros cientos, que se pueden estar estudiando"
MÉRIDA, 11 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Extremadura calcula que la implantación del 'céntimo sanitario' en la región le permitirá recaudar unos 20 millones de euros, según la experiencia que tienen las autonomías que ya lo aplican.
El 'céntimo sanitario' es un impuesto que grava el consumo de carburantes para financiar la sanidad regional, y que supondrá el incremento, en el caso de Extremadura, de 2,4 céntimos por litro de gasolina, y de 2 céntimos por litro de gasóleo, aunque el incremento permitido es de hasta 4 céntimos.
El consejero de Administración Pública y Hacienda realizó este cálculo, a preguntas de los periodistas en una rueda de prensa que ofreció hoy en Mérida para informar de los acuerdos del Consejo de Gobierno, en el que se aprobó el anteproyecto de Ley de Medidas Urgentes y Complementarias para la reducción del déficit público en la Comunidad Autónoma.
La "singularidad" de la implantación de este gravamen en Extremadura, es que el aumento no se aplicará ni a los gasóleos especiales, es decir ni al agrícola ni al de calefacción, y tampoco afectará a los profesionales del transporte, ni de mercancías, ni de personas ni sanitario.
Franco explicó que hasta el momento no se ha decidido cómo se realizará esa excepción a los profesionales, "hay varias alternativas" que el Gobierno regional está estudiando.
El objetivo de este impuesto, explicó el consejero, es "poder afrontar" la prestación de un servicio sanitario de calidad, con el objetivo de que "no se altere", ya que frente a una reducción de los ingresos, son necesarios "recursos adicionales".
En este sentido, Franco explicó que el céntimo sanitario se aplica ya en seis comunidades autónomas, y aseguró que le "consta" la intención de ponerlo en marcha por parte de regiones que todavía no lo han implantado.
COPAGO SANITARIO
Finalmente, y a preguntas de los periodistas sobre la posibilidad de instaurar el copago sanitario, tal y como están estudiando otras regiones, el consejero aseveró que "es una cuestión recurrente en el tiempo, que viene de muy atrás, y en su momento nos pronunciaremos, en el momento que corresponda".
Añadió que debido a la situación de las finanzas, esta "es una posibilidad más, de entre otros cientos, que se pueden estar estudiando", y aseguró que no sabe "si se materializarán o no en su momento", dijo.
En este sentido, Ángel Franco consideró que si "llegase el caso", ésta debería ser una decisión "compartida por todas las administraciones implicadas en la gestión sanitaria", dijo. "No creo que pueda una Comunidad Autónoma decidir unilateralmente introducir un cambio tan sensible en la gestión de la sanidad".
Añadió que ayer mantuvo un encuentro con la consejera de Sanidad y Dependencia, María Jesús Mejuto, y le "consta" que este "no es un tema que la consejera tenga en su agenda de acción inmediata".