La exposición a antenas de móvil, inócua para el embarazo y la cáncer infantil

Actualizado: jueves, 24 junio 2010 15:56

MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un estudio realizado recientemente en Gran Bretaña asegura que la exposición a antenas de telefonía móvil durante el embarazo no aumenta el riesgo de cáncer en niños, según ha informado recientemente la revista 'British Medical Journal', que se hace eco de un estudio llevado a cabo por un grupo de investigadores del Imperial Collegs de Londres.

Según el estudio, los niños que desarrollan cáncer antes de cumplir 5 años no tenían más probabilidades de haber nacido cerca de una antena que otros menores. Además, dentro de sus conclusiones señala que tampoco produce ningún riesgo sobre la salud de las embarazadas ni del feto, aunque vivan expuestas a los campos electromagnéticos.

Los científicos midieron la distancia entre la casa de los niños y la potencia de emisión de las antenas y concluyeron que los valores eran similares tanto en los pequeños que padecían la enfermedad como en los sanos.

El trabajo, liderado por el doctor Paul Elliott, profesor de epidemiología y medicina de salud pública del Imperial Collegs de Londres, analizó 1.397 casos de cáncer en niños de hasta 4 años con leucemia o un tumor en el cerebro o en el sistema nerviosos central entre 1999 y 2001, y los comparó con cuatro controles de la muestra de los registros de natalidad nacional (5.588 niños).

La publicación recuerda que este estudio es el primero en centrase en los riesgo de sufrir cáncer de tumor cerebral y leucemia después de la exposición durante el embarazo. Según el doctor John Bithell, experto del Grupo de Investigación del Cáncer Infantil de la Universidad de Oxford, "estos resultados deberían de ser expuestos por los médicos a sus pacientes con el objetivo de que no se preocupen por la proximidad de sus casas a antenas de teléfonos móvil".

Asimismo, considera que "alejarse de la antena no está justificado según las evidencias actuales. Los valores epidemiológicos están apoyados también por evidencias experimentales que hasta el momento no han demostrado ningún efecto biológico, en vivo o 'in vitro', que podría llevarnos a preocuparnos por el impacto en la salud".