MADRID, 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los expertos desaconsejan "enérgicamente" el consumo de alcohol para combatir el calor extremo, por más que la publicidad sugiera la imagen de un efecto refrescante y saludable, porque el alcohol "no sólo no combate la deshidratación, sino que la propicia debido a sus conocidos efectos diuréticos y a su necesidad de expulsar más líquidos de los ingeridos", explicó hoy el doctor Antoni Gual, de la Unidad de Alcohología del Hospital Clínic de Barcelona.
Así, aunque la cerveza es uno de los remedios 'estrella' en verano, los especialistas previenen del "enorme peligro" que puede generar su consumo excesivo: "se tiene tendencia a pensar que las bebidas alcohólicas van bien cuando uno tiene sed, pero también es conocido por todo el mundo que cuando uno toma cerveza, la tendencia a orinar aumenta extraordinariamente, porque el alcohol tiene un efecto diurético", aseguró el doctor Gual.
En concreto, cuando se toman bebidas alcohólicas, su ingesta lleva a eliminar el alcohol gastando más agua de la que se ha ingerido y, por lo tanto, se acaba produciendo un efecto de deshidratación.