MADRID 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
Expertos en alergología han avisado de que en la próxima década más de 30 millones de españoles padecerán algún tipo de alergia, ya que la incidencia de estas enfermedades aumenta a un ritmo anual de un 2 por ciento. Actualmente, hay doce millones de personas alérgicas, según han asegurado durante el XXVIII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), que se celebra desde este miércoles hasta el sábado.
A juicio de los especialistas, se ha producido un cambio tanto en los patrones de las reacciones alérgicas como en los datos de incidencia en la población, ya que el perfil de los pacientes ha aumentado en edad, con un mayor predominio de mujeres.
Además, según ha señalado la coordinadora del Comité Organizador del Congreso, Blanca García, se está produciendo "no sólo" a un aumento de la frecuencia de las enfermedades alérgicas sino también de la complejidad de la patología alérgica. De hecho, ha apostillado, son cada vez más frecuentes las sensibilizaciones múltiples a alérgenos respiratorios o a múltiples alimentos tanto en niños como en adultos.
En este contexto, los expertos han destacado la importancia de afinar el diagnóstico y optimizar los tratamientos por el impacto sociosanitario que conllevan y la repercusión en la calidad de vida del paciente. En este sentido, el presidente de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC), José María Olaguibel, ha recordado que el tratamiento y el diagnóstico de las alergias es cada vez "más personalizado".
Sin embargo, este especialista ha reconocido que la personalización de los tratamientos provoca un "incremento en el abordaje de los pacientes y el tiempo que se dedica a ellos" en un momento en el que, ha recalcado, "los recursos en las consultas y el déficit de especialistas se hace más notable".
Y es que, las enfermedades alérgicas comprenden una serie de patologías de expresión clínica muy diversa --respiratoria, cutánea, digestiva o multiorgánica-- y gravedad variable, desencadenadas por unos agentes, los alérgenos, que pueden ser identificados y sobre los que se pueden efectuar acciones de evitación, prevención y curación.
Además, esta complejidad obliga a reorientar el abordaje del paciente alérgico, proporcionando una visión global y revisando adecuadamente el diagnóstico y tratamientos administrados. "Es preciso considerar la alergia como una enfermedad unitaria. El alérgico es una paciente único con manifestaciones múltiples de la enfermedad: rinitis, asma, alergia a medicamentos, dermatitis, urticaria, anafilaxia. Se trata, en definitiva de conocer el mecanismo común, diagnosticar sus causas y seleccionar tratamientos encaminados al fondo de los procesos", ha apuntado Olaguibel.
Por tanto, el campo de actuación de los alergólogos para garantizar la excelencia en una enfermedad que puede aparecer a lo largo de toda la vida se basa en dar un enfoque preventivo para las enfermedades alérgicas e impulsar la investigación sobre el diagnóstico, las causas de la enfermedad y su tratamiento.
"Ante los primeros síntomas de una reacción alérgica la precisión en el diagnóstico va a permitir el desarrollo de nuevas terapias o, al menos, la utilización correcta de las actuales, adecuándolas a los pacientes y personalizando cada vez los tratamientos. Un correcto diagnóstico y tratamiento pueden modificar el curso de la enfermedad", ha aclarado la coordinadora del Comité Científico del Congreso, Rosa Muñoz.