MADRID, 10 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad asegura que aún no han recibido ninguna propuesta formal de la Comunidad de Madrid para que se modifique la actual ley antitabaco y permitir que se fume en los casinos, después de que se haya confirmado que el proyecto 'Eurovegas' se llevará a cabo en Madrid.
Tras esta decisión, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, ha reconocido que vería "lógico" que en los casinos que formarán de este proyecto se pueda fumar, tal y como ha solicitado el impulsor de esta iniciativa, Sheldon G. Adelson, si bien ha admitido que la decisión está en manos del Gobierno nacional.
No obstante, y pese a que la propia ministra del ramo Ana Mato ha admitido en alguna ocasión que "escuchará y valorará" todas las propuestas que se le hagan, fuentes de su departamento han reconocido a Europa Press que "aún no han recibido ninguna propuesta formal ni concreta" para modificar la actual ley antitabaco, ni de Madrid ni de otras comunidades como Cataluña, donde se va a llevar a cabo un proyecto similar al de 'Eurovegas' bajo el nombre de 'Barcelona Worlds'.
Además, las mismas fuentes insisten en que no hay intención de modificar la actual normativa, vigente desde enero de 2011, para hacer una norma más permisiva que pueda perjudicar a la salud de los ciudadanos.
La actual ley antitabaco establece en su artículo séptimo la prohibición de fumar en centros de ocio o esparcimiento, salas de fiesta y establecimientos de juego o de uso público, entre otros lugares, una condición que debería modificarse para que se hiciera efectiva la voluntad de los impulsores de Eurovegas y de Esperanza Aguirre.
Aunque aún no han presentado ninguna propuesta formal al respecto, todavía hay tiempo para hacerlo ya que la primera fase del proyecto no se espera que esté terminada hasta dentro de dos años. De hecho, la anterior modificación de la norma apenas requirió medio año de trámite parlamentario, ya que el borrador del Ministerio llegó al Congreso en junio de 2010 y la norma recibió el visto bueno definitivo de las Cortes en diciembre del mismo año.
Durante su tramitación, el PP introdujo en el Senado una enmienda que abría la posibilidad a casinos, bingos y salas de juego a reservar hasta un 30 por ciento de su espacio para fumadores, sin servicio de juego ni de consumiciones, pero la propuesta fue finalmente rechazada en la votación final en el Congreso.