MADRID, 18 Sep. (EUROPA PRESS) -
Técnicos y decisores europeos se reunirán en un taller en el Instituto de Salud Carlos III (Madrid), este jueves y viernes, con el propósito de desarrollar herramientas que permitan reducir la contaminación atmosférica, promocionar la salud en las urbes de la comunidad, mitigar el cambio climático y reducir la huella de carbono, con pespectiva de un plazo corto y medio, para 2030, y con vocación de largo, para 2050.
El proyecto, denominado ICARUS ('Integrated Climate forcing and Air pollution Reduction in Urban Systems'), está financiado por el programa H2020, y en él participan 18 instituciones europeas que representan a 9 ciudades, entre las que se encuentra Madrid, a través del Centro Nacional de Sanidad Ambiental y el Centro Nacional de Epidemiología, en colaboración con la Universidad Politécnica.
El objetivo último del taller, en el que participan expertos en calidad del aire y salud pública, así como decisores políticos de las ciudades que colaboran en el proyecto, es perfilar visiones de ciudades europeas futuras que sean inteligentes, verdes y saludables. Estas jornadas perseguirán, asimismo, incrementar el bienestar social, la igualdad y la habitabilidad de las áreas urbanas en las que se entra el estudio.
Consta de dos etapas. La primera, protagonizada por expertos, se centra en el análisis de los desafíos actuales en las áreas de desarrollo urbano, calidad del aire, cambio climático, energía, transporte, bienestar social, desafíos de salud y la innovación empresarial. Se incluirán otros aspectos del desarrollo urbano, como la vivienda, la política social o el ocio, en la medida en que sean relevantes para las dinámicas dentro de los sectores mencionados. Se proyecta desde la escala local/urbana a la global.
La segunda etapa consistirá en transferir estas vías de cambio y desafíos a las visiones sobre ciudades inteligentes, verdes y saludables ideadas por expertos y decisores políticos del medio urbano. Los participantes en esta fase tomarán como punto de partida estilos de vida de las diferentes ciudades, que servirán para la recreación de las visiones de ciudades futuras en 2050.
También se discutirá sobre el proceso de transición, es decir, sobre el papel de las instituciones, expertos o ciudadanos en la toma de decisiones y en la implementación de estas visiones. Los resultados de los debates en grupos serán documentados para representar las distintas posiciones.