Europa se enfrenta a una "bomba de relojería" por el aumento del coste de la tuberculosis

Actualizado: viernes, 16 agosto 2013 15:41


LONDRES, 16 Ago. (Reuters/EP) -

Un estudio del Hospital Universitario Schleswig-Holstein en Kiel (Alemania) alerta de que Europa deberá hacer frente a una multimillonaria "bomba de relojería" como consecuencia del aumento de los costes que conllevará controlar la tuberculosis, a medida que están surgiendo nuevas cepas resistentes a los tratamientos actuales.

A menudo considerada una enfermedad del pasado o exclusiva de comunidades marginales, el estudio detalla que está enfermedad pulmonar ya está generando costes directos de más de 500 millones de euros anuales en el continente, a los que habría que sumar otros 5.300 millones de euros por pérdidas de productividad.

Además, los autores apuntan en el último número de la revista 'European Respiratory Journal' que la carga económica de la tuberculosis supera ampliamente los potenciales costos de invertir en investigación para desarrollar tratamientos más efectivos, por lo que urgen a los gobiernos y a la industria a tomar medidas de forma urgente.

"Sabemos que es muy costoso desarrollar nuevos fármacos y vacunas, pero si uno toma en consideración estos costes (de la enfermedad), entonces todo está justificado", dijo Roland Diel, profesor de Economía de la Salud y director de la investigación.

El aumento de cepas que no pueden ser tratadas ni siquiera con los medicamentos más innovadores han convertido a la tuberculosis en uno de los problemas sanitarios más acuciantes del mundo.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2011 se detectaron 8,7 millones de casos y 1,4 millones de fallecimientos en todo el mundo. Además, se prevé que en 2015 el número de afectados por cepas resistentes sea superior a los dos millones.

En el caso de Europa, el coste total del tratamiento es de unos 536,8 millones de euro pero, si se tiene en cuenta que cada año se detectan 70.000 nuevos casos de tuberculosis resistente, la situación podría cambiar rápidamente.

"Es una bomba de relojería en términos de los casos resistentes a los fármacos. Son apenas una pequeña parte ahora, pero aumentarán (...) por lo que los costes también crecerán", dijo el autor.