MADRID, 5 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un equipo de investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha abierto nuevas vías para el tratamiento de la esquizofrenia después de haber logrado revertir en un modelo animal, mediante fármacos antipsicóticos, las alucinaciones y alteraciones cognitivas provocadas con fenciclidina o polvo de ángel, una droga alucinógena cuyos efectos en el cerebro humano se asemejan a los de esta enfermedad mental.
La investigación, que ha sido dirigida por el científico del Instituto de Investigaciones Biomédicas de Barcelona Francesc Artigas y aparece publicada en la revista 'Proceedings' de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos, también apunta el papel crucial de la corteza prefrontal del cerebro humano en el desarrollo de la esquizofrenia.
Con el objeto de encontrar nuevas vías de acción farmacológica, los investigadores analizaron los efectos de la fenciclidina o polvo de ángel en el cerebro. Las observaciones permitieron describir por primera vez un mecanismo que podría explicar cómo se originan las alucinaciones y alteraciones cognitivas que produce esta droga alucinógena, cuyo consumo es residual en España pero está muy extendido en países como Estados Unidos.
Según explica el propio Artigas, la fenciclidina anula casi completamente las ondas de baja frecuencia que sincronizan la actividad de los circuitos neuronales, lo que propicia "una mayor desorganización en la actividad neuronal". Este patrón, fuera de los esquemas rítmicos normales, podría ser la causa de las alucinaciones y alteraciones propias del polvo de ángel.
A partir de este hallazgo, el estudio, que ha contado con la participación destacada de la investigadora Pau Celada, ha comprobado que dichos efectos se revierten tras la administración de dos fármacos antipsicóticos: haloperidol y clozapina. Este dato, a juicio del investigador del CSIC, es relevante para profundizar en el conocimiento de la esquizofrenia y su tratamiento.
De igual modo, el estudio demuestra que la fenciclidina provoca, en el modelo animal, importantes alteraciones en la corteza prefrontal, una parte del cerebro profundamente implicada en procesos cognitivos, de percepción y de planificación del comportamiento.
Según las observaciones del equipo, el polvo de ángel aumenta la actividad de un 45 por ciento de las neuronas piramidales, al tiempo que disminuye la actividad de un 33 por ciento de las mismas. Este proceso altera el funcionamiento normal de la corteza prefrontal, área cerebral clave en el estudio de la esquizofrenia.