Un estudio avala que enfermeras sigan el tratamiento del VIH

EP
Actualizado: miércoles, 16 junio 2010 12:42

MADRID, 16 Jun. (EUROPA PRESS) -

El seguimiento de la terapia antirretroviral (ART, por sus siglas en inglés) realizado por enfermeras formadas de Atención Primaria es tan seguro y efectivo como si el seguimiento lo realizara un médico, según un trabajo realizado por investigadores de la Universidad de

New South Wales, en Sidney (Australia) y la Universidad de Maryland, en Baltimore (Estados Unidos), que ha salido publicado esta semana en 'The Lancet'.

El hecho de que, en todo el mundo, hay una escasez de 4,3 millones de trabajadores de la sanidad significa que mucha gente no tiene acceso a la terapia antirretroviral que necesita. Para lograr el objetivo de llegar al acceso universal a estos medicamentos este año, la Organización Mundial de la Salud (OMS) propone un 'paso de tareas' de los médicos a otros trabajadores sanitarios de menor nivel, permitiendo a las enfermeras y los trabajadores sociales para repartir los ART, para que más pacientes puedan recibir tratamientos.

Sudáfrica tiene el mayor programa nacional de ART de todo el mundo. Sin embargo, el país sólo cuenta con 17,4 médicos por cada 100.000 habitantes. Para enfrentar estas carencias, se planea realizar un 'cambio de tareas' a gran escala, que aumente el papel de las enfermeras en los cuidados del paciente con VIH y en el seguimiento del tratamiento con ART. Sin embargo, se han realizado pocos trabajos que aclaren si esta medida será eficaz y segura.

Para conseguir más evidencias, el equipo de investigadores del Programa Global Internacional para la Investigación sobre Sida en Sudáfrica (CIPRA-SA, por sus siglas en inglés) comparó los resultados de las enfermeras con el manejo que realizan los médicos del seguimiento del tratamiento con ART en los pacientes con VIH en dos clínicas de Atención Primaria de Sudáfrica.

Entre 2005 y 2007, un total de 812 pacientes con VIH fueron asignados, de forma randomizada, a un programa de seguimiento del tratamiento con antirretrovirales manejado por enfermeras (408) y otro manejado por médicos (404). Los resultados de cada opción fueron definidos teniendo en cuenta las tasas de muertes, los fallos virales, la minimización de los efectos tóxicos del tratamiento y si los pacientes acudían a las citas programadas.

En general, 192 pacientes (48%) sufrieron fallos en el tratamiento en el grupo controlado por las enfermeras y 179 (44%) en el grupo de los médicos. Dos años después, las muertes (10 frente a 11), los fallos virales (44 frente a 39), los fallos de toxicidad (68 vs 66) y los abandonos (70 contra 63) fueron similares en ambos grupos.

Según los autores de este trabajo, estos descubrimientos "respaldan la estrategia del cambio de tareas y sugiere que el manejo de los pacientes con VIH que realizan las enfermeras puede ser seguro y efectivo, probablemente incluso para aquellas personas que comienzan la terapia con una infección avanzada por VIH". Sin embargo, advierten de que "extender esta práctica necesitará aumentar la formación, una redefinición del campo de prácticas para las enfermeras"